SD HUESCA

Joaquín Sorribas: "Estamos preparados para esta guerra"

Los jugadores hacen piña y se conjuran para superar unidos la mala situación en la Liga.

De izquierda a derecha, Camacho, Gilvan, Tariq y Javi Martínez en el entrenamiento de ayer.
Joaquín Sorribas: "Estamos preparados para esta guerra"
JAVIER BLASCO

De entre los valores que el Huesca ha de exponer para salir adelante, el entrenamiento de ayer lanzó dos: la unidad y la entereza mental. De ambos dio fe el capitán, Joaquín Sorribas, quien además reveló un encuentro previo en el vestuario que había servido de purga y conjura para los futbolistas. En el arranque de la sesión, Quique Hernández reunió a los suyos en un círculo para exponer reflexiones y orientar al equipo para revertir la mala situación en la liga después del doble disgusto ante Barcelona B y Elche. Además, parte de la cúpula dirigente respaldó a futbolistas y técnicos en la mañana del Instituto Montearagón.


Sorribas midió la temperatura de sus compañeros y encontró un clima esperanzador pese a los últimos mazazos y al cierre de un mes de octubre particularmente delicado. No hay un desmoronamiento psicológico y las cabezas deben servir para que el resto de mecanismos se activen. Hay piña. Por algo se empieza. "Era una semana esperanzadora, pero cuando las cosas te van mal las circunstancias no ayudan. Con todo, que nadie se preocupe, cuando se tiene un frente común es más fácil. Tenemos muchas ganar de dar a la afición y a nosotros mismos las victorias que necesitamos", sostuvo el de Abella.


Toca poner buena cara al mal tiempo y aprender incluso de las peores circunstancias: "Casi mejor perder en el último minuto, pues nos ha unido una barbaridad y eso se notó por la mañana en el vestuario. Todo el mundo, lejos de estar cabizbajo, tiene ganas de ayudar y salir adelante", insistía el centrocampista, dispuesto tanto a restar presión a los suyos como a exponer que montañas más altas se han escalado.


A su juicio, insistía Sorri, "un mazazo muy duro es una enfermedad o un accidente. Esto es una oportunidad para demostrarnos a nosotros mismos que somos capaces, todo el mundo está preparado para resistir en esta guerra. El vestuario me da mucha confianza". Esperanzado ante el crecimiento táctico y físico del Huesca, Sorribas comentaba que "a veces la cabeza es el peor enemigo, las ganas de ganar crean el efecto inverso con la ansiedad ante el gol. Hemos de nadar en estas aguas y el reto común es sacar esto adelante. Antes de la sesión hablamos durante media hora y la sensación fue buenísima. El reto es salir adelante", seguía el 'capi', quien aludía a una recuperación inminente.


Muy seguro de sí mismo, atisba una próxima mejora en la tabla, y continuaba con que "algo se está gestando, el trabajo es muy bueno. A veces tardan en llegar los resultados, pero con los ingredientes adecuados ganaremos tres o cuatro encuentros seguidos. En diciembre podemos estar fuera del descenso con el respaldo de todos". Valga la metáfora final de un David Bauzá "que tras estar sufriendo siete meses salta al campo y da gusto verle jugar".