Satisfacción por el reparto de los derechos de televisión

El club estima que, con la venta centralizada, en Primera División, cobraría al menos 30 millones de euros por temporada.

Estimación de ingresos de la LFP
Estimación de ingresos de la LFP

El Real Zaragoza ha recibido con satisfacción la aprobación del Real Decreto que regula la venta centralizada de los derechos de televisión desde la temporada 2016-2017. Este modelo de comercialización conjunta, considerado más proporcionado, equitativo y ajustado a variables, es una reivindicación histórica de la SAD aragonesa. Desde hace una década, el Zaragoza siempre se ha alineado en las distintas coaliciones impulsadas por los llamados "clubes de la clase media", como el G-6 que hace cuatro años reunió a Zaragoza, Villarreal, Sevilla, Espanyol, Athletic y Real Sociedad. La piedra angular de sus exigencias fue la negociación conjunta (no individual, como hasta ahora), a través de la LFP, de los derechos de televisión, al estilo de los modelos implantados en las principales ligas europeas. Este sistema se oponía al bloque liderado por Barcelona y Real Madrid, partidarios de un reparto menos centralizado y con mayores desequilibrios entre los clubes mejor y peor retribuidos.


En las oficinas del Zaragoza se valora "positivamente" este nuevo reparto. "Es algo beneficioso porque nos beneficia a todos. A más dinero, la tarta será mayor, y más nos tocará", afirmó Fernando Rodrigo, consejero del área económica del club. La nueva comercialización de derechos no entrará en vigor hasta la temporada 2016-2017. El actual escenario del Real Zaragoza, su incertidumbre deportiva, impide efectuar proyecciones firmes, pero, en todo caso, la SAD posee una previsión somera de acuerdo al marco de negociación recién aprobado.


"Estando en Segunda, la mejora es poco significativa, pero sí es importante para el Zaragoza", explica Rodrigo. El nuevo reparto reserva un 10% de la bolsa del fútbol profesional para la categoría de plata. De esa porción, el 70% se prorrateará a partes iguales entre los 22 clubes de Segunda. Un 15% varía en función de la clasificación en la última temporada. Y el último 15% lo determina la implantación social: un 33,3% de acuerdo a los ingresos por abonos y taquillas y un 66,6% dependiendo de otras variables como la audiencia y la publicidad generada en las retransmisiones televisivas. Este sistema, aun en Segunda, favorece al Zaragoza.


El club aragonés es uno de los destacados de la categoría en abonados y venta de entradas, y sus cuotas de audiencia no solo sobresalen en Segunda, sino en todo el fútbol español. Según un informe manejado por el club, el Zaragoza es el séptimo equipo con mejores ratios de ‘share’, mejorando así incluso a 13 clubes de Primera. "El borrador inicial contemplaba que el 10% de Segunda fuera fijo, a partes iguales entre los 22 equipos. A nosotros no nos favorecía, porque, con todos los respetos, el Zaragoza no tiene el impacto social y la masa de aficionados que el Llagostera. Por eso, el nuevo modelo es positivo también en Segunda. Nos permitirá, al menos, sostener nuestros ingresos actuales. Y en Primera está claro que nuestro volumen de ingresos crecería de forma relevante", asegura Rodrigo.


Si no asciende esta primavera, la próxima temporada, el Zaragoza cobrará del contrato que entra en vigor en julio con Mediapro (expira el actual con DTS) un total de 4 millones de euros a ingresar en diez mensualidades iguales de julio de 2015 a abril de 2016. Si está en Primera, el ingreso será de 26 millones.


En cualquier caso, el objetivo del club aragonés es figurar ya en la elite para cuando entre en vigor el modelo de venta centralizada dentro de dos temporadas. Las previsiones de la LFP contemplan dos escenarios de comercialización: uno moderado, que obtendría 1.000 millones de euros por temporada (en periodos de tres), y otro optimista, que ascendería hasta los 1.500 millones de euros.


De acuerdo a las estimaciones del Zaragoza en la coyuntura intermedia (1.000 millones), le corresponderían en Primera, al menos, 30 millones de euros en su primer año. Esa cifra estaría lastrada porque en las anteriores temporadas habría sido equipo de Segunda y no cobraría bonificaciones por clasificación en Primera. Pero sí se embolsaría destacadas variables por audiencias, abonados... En Segunda, con el nuevo modelo, en ese mismo supuesto, percibiría entre 4 y 4,5 millones; entre 5 y 5,5 millones si la LFP vende los derechos por 1.500 millones finalmente.