Otra noche mágica

La peña Los Aúpas ha reunido al equipo campeón de La Recopa un mes antes del vigésimo aniversario de la final. Además, ha homenajeado a Juan Morgado.

Solana, Higuera, Belsué, García Sanjuán, Gay y Poyet.
Solana, Higuera, Belsué, García Sanjuán, Gay y Poyet.
G. Mestre

Nadie dudaba que la de este viernes, 20 de abril, iba a ser una noche especial en Zaragoza. El equipo que ganó la Recopa en 1995 se reunía, justo un mes antes del vigésimo aniversario de aquella mítica final contra el Arsenal, para recordar los tiempos en los que el Real Zaragoza reinaba en Europa. Como si volvieran a saltar al césped del Parque de los Príncipes, los 'héroes de París' han llegado al hotel Reino de Aragón sin las caras serias y las sonrisas nerviosas previas a un gran partido. El trofeo ya lo ganaron hace dos décadas. Éste solo era otro capitulo de la celebración.


Cadrún, Belsué, Aguado, Aragón, Poyet, Higuera, Pardeza, Esnáider... La alineación la firmaría, pese a que el tiempo no perdona a nadie, casi cualquier equipo. Y eso que a la cita faltaron algunos de los protagonistas de aquel día. Sobre todo aquel genio al que, a falta de pocos segundos para que acabara el partido, se le ocurrió mandar el balón al cielo de París y sorprender no solo a Seaman, sino al mundo entero. Nayim, a quien todos esperaban, no ha podido acudir por motivos personales, una baja sensible pero que no ha empañado la celebración.


Todos y cada uno de los exjugadores recordaron la amistad que les unía como una de las claves del éxito de aquel equipo. Y la relación se mantiene, pese al paso del tiempo. De hecho, los 'héroes de París' incluso tienen un grupo de Whatsapp, llamado "Real Zaragoza 1995".

Un equipo de lujo


"Esto nos hace sentirnos muy viejos", bromeaba Esnáider. "Pero felices de poder reunirnos. Han pasado 20 años y seguimos hablando, estamos en contacto, la relación es muy fluida. He tenido grupos muy buenos de compañeros, pero como este ninguno", indicaba el delantero, quien recordaba el día de la final: "Disfrutamos mucho, aunque durante el partido no tanto, porque sufrimos. Pero después fue todo espectacular. Además, Esnáider fue uno de los protagonistas del partido con su gol, aunque el de Nayim lo acabara eclipsando: "Fue un desahogo, porque durante el partido no me sentía del todo bien. Fue un momento muy lindo. Pero si el mio fue un desahogo, imagina el de Nayim. Pensé que era un loco". 


"Estamos encantados de volver a nuestra gente, a los aficionados", aseguraba Higuera, quien también se ponía nostálgico para recordar aquel 10 de mayo de 1995: "Mucha alegría, mucha nostalgia, muchos recuerdos. Dentro de la carrera de un futbolista haber podido vivir todas esas sensaciones es algo maravilloso". 


"Es muy emotivo volver a ver a todos estos amigos. Porque, al fin y al cabo, somos un grupo de amigos. Eso se demuestra con el paso del tiempo", decía Xavi Aguado, quien reconoce que ese "grupo de amigos" llegó más lejos de lo que ellos mismos esperaban: "La mayoría veníamos de no ganar nada, de una promoción dolorosa contra el Murcia en el año 91, pero tuvimos la fortuna de ir creciendo juntos. Mantener la base fue fundamental". 

Miles de recuerdos


Cuando piensa en el día de la final, Aguado se acuerda más de la celebración que del propio encuentro: "La imagen que recuerdo es la alegría que reportó ese triunfo a la afición, tanto en el Parque de los Príncipes como en Zaragoza, en la plaza del Pilar. Ahora la gente me para por Zaragoza y todos se acuerdan de dónde estaban aquel día. Eso me llega mucho". 


Uno de los protagonistas de la noche ha sido Gustavo Poyet, por lo que significa para el zaragocismo y porque no se le esperaba. Pero, finalmente, el uruguayo pudo venir. "Era un grupo especial, por eso logramos lo que logramos", aseguraba Poyet, como Aguado, recuerda con especial cariño a la afición: "Me vienen a la cabeza muchas imágenes. Una, la más vergonzosa, a mí llorando", bromeaba: "Pero sobre todo las celebraciones. En ese momento es cuando nos dimos cuenta de que habíamos ganado una competición europea, algo que al principio de la temporada ni se nos pasaba por la cabeza. 


Andoni Cedrún, por su parte, tampoco se olvidó del partido a partido y del presente del Real Zaragoza. "Siento una gran alegría. Es que somos muy grandes, tenemos dos títulos europeos. También tenemos que recordar a Los Magníficos", indicaba el exportero: "Pero yo estoy pensando en ganar al Sporting. Esto está muy bien, es una reivindicación de lo que hemos sido, un premio a la nostalgia... Pero la cruda realidad es que tenemos que ganar al Sporting". 

Homenaje a Juan Morgado


Los grandes culpables de esta reunión de mitos del zaragocismo han sido los miembros de la peña Los Aúpas, la más antigua del Real Zaragoza, encabezados por su presidente, Sebastián Lasierra. Los veteranos socios de este grupo decidieron homenajear a los campeones de la Recopa en su cena anual, en la que en esta ocasión celebran su 62 aniversario. Pero Los Aúpas no solo han querido rendirles homenaje a los 'héroes de París', sino también a Juan Morgado, al que le han impuesto la insignia de oro y brillantes de la peña. El hasta ahora delegado del Real Zaragoza anunció su jubilación este año tras varias décadas ligado al club aragonés, ya que llegó como jugador en 1981 procedente del Deportivo Alavés y continuó en la función de delegado.