Real Zaragoza

El Real Zaragoza vuelve al trabajo en medio de una gran expectación

Multitud de aficionados se acercaron a la Ciudad Deportiva para presenciar el entrenamiento del equipo. En él, Zuculini se ejercitó con el resto de sus compañeros.

Entrenamiento del Real Zaragoza
Entrenamiento Real Zaragoza
GUILLERMO C.

A estas alturas, ya no queda ninguna duda de que el Real Zaragoza ha logrado conquistar a su afición. La remontada emprendida por el conjunto aragonés, sustentada por los ánimos ofrecidos desde la grada, podría acabar haciendo historia en caso de que el domingo se certificase la permanencia. Un hito basado en el esfuerzo de la plantilla en perfecta comunión con su masa social. Pilares básicos que volvieron a vivirse en el primer entrenamiento de la semana, llevado a cabo este martes por la tarde en la Ciudad Deportiva.


Con una afluencia de público mayor de lo normal, con especial presencia de niños, varios de ellos luciendo colores zaragocistas, el equipo volvió al trabajo tras casi tres días de fiesta. La sesión, en la que participó toda la plantilla con la única ausencia del lesionado Aranda, resultó leve en cuanto a carga de trabajo. Más centrada a cuidar a los futbolistas que en repasar conceptos tácticos.


Así, el grupo, que trabajó unido, realizó varios ejercicios con balón. Especialmente, rondos y partidos en espacios reducidos. Con los jugadores del filial Joel, Kevin, Ortí, Nierga y Alcolea completando al equipo, la sesión transcurrió en un buen ambiente general. Acompañado, incluso, por el clima, aunque la lluvia amenazaba no terminó de romper.


Zuculini, que recibió la semana pasada el alta hospitalaria y que, finalmente, se quedó sin vestir ante el Racing, trabajó con total normalidad. Por ello, podría llegar al domingo en condiciones de jugar. Apoño, por su parte, abandonó la sesión un poco antes de que acabase, aunque no se le observó ninguna molestia visible y su acción obedecería más a criterios de precaución.