Real Zaragoza

Vista al frente

La victoria en Mestalla ya es pasado lejano para el Real Zaragoza. Ayer, los pupilos de Manolo Jiménez comenzaron a preparar el choque ante el Atlético en lo que puede ser la semana del espaldarazo.

Jimenez durante el partido ante Valencia
Partido en Mestalla_4
EFE

No hay tiempo para digerir lo conseguido en Valencia, para mirar hacia atrás. La épica de Mestalla ya es pasado en el Real Zaragoza. Debido a su todavía débil situación deportiva, el conjunto aragonés está obligado a mirar de manera perpetua hacia el frente. Lugar en el que, de manera visible, se dibuja el Atlético de Madrid, el cual visitará La Romareda este domingo a las 12.00. Oportunidad incomparable para que los zaragocistas puedan, de verdad, engancharse a la lucha por la salvación.


Para lograrlo, el equipo de Manolo Jiménez se puso a trabajar en la tarde del jueves. Primera sesión orientada al enfrentamiento ante los colchoneros, con especial atención a la recuperación física de aquellos que jugaron en Valencia. En un momento tan convulso como el que viven los zaragozanos, lo prioritario es acumular fuerza. Poder llegar con el corazón allí donde la técnica y el físico se han negado en lo que va de curso. Seña e identidad del cuadro de Manolo Jiménez durante los dos últimos compromisos ligueros, esos que podrían cimentar la semana de la resurrección blanquilla.


Así, no hubo grandes esfuerzos ni carga táctica. Como es tradición, el equipo titular se ejercitó por separado, realizando una leve carrera continua que completaron con trabajo en el gimnasio. Los suplentes, entre los que estuvo Álvarez, que solo jugó 20 minutos en el estadio valencianista, hicieron trabajos orientados a mejorar el desplazamiento en largo del balón. Un recurso cada vez más presente en el juego zaragocista, que últimamente parece haber evolucionado de intentar una propuesta basada en la posesión a intentar pillar a la contra a sus adversarios. Finalmente, la sesión terminó con el desarrollo de un partidillo a fútbol siete en el que, incluso, tomó parte el propio Jiménez.


Semana clave


Hace justamente una vuelta, el Real Zaragoza comenzó su descenso a los infiernos en una semana de similares características a la actual. El calendario, caprichoso, ha querido que durante la segunda vuelta los aragoneses vuelvan a encadenar los partidos ante Osasuna, Valencia y Atlético en solo nueve días. Toda una etapa reina de ciclismo en la que, al menos de momento, los blanquillos están cumpliendo satisfactoriamente.


Con cuatro puntos consecutivos, el conjunto zaragocista deberá dar forma final a su supuesta recuperación con un partido de mérito ante los madrileños. Un complicado rival que, por contra, no parece terminar de arrancar en dirección a los puestos europeos, su teórico hábitat natural. Hasta la fecha, los zaragozanos han sido incapaces de sumar dos triunfos seguidos. Algo que se antoja totalmente necesario para poder optar a continuar un año más en Primera División.