Caro, el portero sevillista que quiso Lalo

El Real Zaragoza se topará este sábado con uno de los guardametas por los que peleó la dirección deportiva tras fallar Alberto y antes de fichar a Cristian Álvarez.

José Antonio Caro, portero del Sevilla Atlético que pretendió el Real Zaragoza, en el partido del filial andaluz jugado en Huesca hace un mes.
Caro, el portero sevillista que quiso Lalo
Javier Broto

A mediados de julio pasado, ni por asomo pudo pensar José Antonio Caro que las cosas le estarían saliendo tan torcidas como acontecen por el Sevilla Atlético, equipo del que es su portero titular, como ya lo fue la temporada pasada en la reaparición del filial sevillista en la Segunda División. Porque Caro, en mitad del verano, pudo fichar por el Real Zaragoza si los tratos hubieran tomado el camino adecuado. Y, de haber salido en positivo aquella maniobra, hoy sería guardameta zaragocista en la previa a la visita del cuadro aragonés a la Ciudad Deportiva del club de Nervión y no defendería la portería del colista más flojo de los últimos lustros en Segunda.

Caro fue la opción B de Lalo Arantegui cuando Alberto, la prioridad para el puesto de cancerbero desde junio, no logró desengancharse del Getafe (el Real Zaragoza lo quería en propiedad), y club que preside Ángel Torres prefirió cederlo al Rayo Vallecano. Lalo valoró durante muchos días traer a Caro como portero referencial que acompañara a Ratón. Sorprendió, porque no respondía al perfil de especialista veterano y con poso en el fútbol profesional, condiciones que sí reunía Alberto y, finalmente, quien vino: Cristian Álvarez. Porque Caro anda todavía por los 23 años y es, incluso, más joven que Ratón. Pero la gran temporada que firmó este onubense (de La Palma del Condado, como Pardeza) el año pasado en el Sevilla Atlético era suficiente aval como para apostar por él.

De hecho, si las gestiones de la dirección deportiva del Real Zaragoza no se consumaron en positivo fue porque el Sevilla no quiso dejar salir a Caro traspasado. Solo se barajaba una cesión, en todo caso. Y Lalo no quería un portero prestado. Y, en el organigrama técnico del club del Pizjuán, Caro contaba como tercer portero de la primera plantilla, que este año juega la Champions League y tiene altas aspiraciones. Por eso, aquello acabó en vía muerta para el Real Zaragoza.

Caro se quedó en Sevilla. Y empezó la liga en Segunda, como el año pasado, en el filial, a la espera de ver qué sucede con los porteros del primer equipo, el internacional Sergio Rico y su suplente, David Soria. No está siendo un buen inicio de temporada para el arquero andaluz. El Sevilla Atlético está sufriendo las de Caín, nada que ver con la brillante campaña anterior. No han ganado un solo partido en las primeras 10 jornadas. Son colistas, totalmente descolgados, con solo 4 puntos. Sus síntomas son preocupantes, si no alarmantes.

Son las cosas del destino. Nunca se sabe por dónde va a salir la vida. Caro, conocido en el vestuario como 'Churripi', defenderá este sábado en el campo de la Ciudad Deportiva sevillista al filial de Nervión cuando, hace tres meses, hubo días en los que pareció que podía haberse convertido en guardameta del Real Zaragoza en cualquier momento.

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