La plantilla del Real Zaragoza trabajó en la tarde este lunes utilizando por primera vez las porterías en el campo de Boltaña. Lo había hecho el sábado brevemente en la Ciudad Deportiva (con golazos de Javi Ros y Papunashvili, los primeros del verano), y Natxo González ha repetido experiencia en la sesión vespertina del primer día de labor en el Pirineo Aragonés. El técnico, por ahora, está insistiendo en ejercicios de control, pase rápido, desplazamientos largos del balón, donde el objetivo no es el gol sino la automatización de movimientos y resortes mentales para jugar la pelota con celeridad y precisión en espacios grandes.

El final del día, en el excelente campo boltañés, ha puesto por primera vez las porterías portátiles en uso. En un terreno de juego de 65 metros de largo, Natxo ha propuesto dos equipos de once jugadores para, ya sí, intentar anotar goles. Esta vez, en dos tiempos de poco más de 15 minutos, no ha habido puntería. Los dos equipos formaron con un sistema 4-2-3-1, lo que es una declaración inicial de las intenciones del nuevo entrenador del Real Zaragoza.

De naranja formaron Alcolea; Benito, Jesús Valentín, Zalaya, Lasure; Zapater, Javi Ros; Xumetra, Febas, Oyarzun; y Borja Iglesias.

De azul, iniciaron el simulacro Ratón; Delmás, Jorge Guti, Grippo, Ángel Martínez; Eguaras, Raúl Guti; Papunashvili, Buff, Pombo; y Raí Nascimento. En este bloque, en la segunda parte, entraron los jugadores que saben que deben marcharse del equipo antes del 31 de agosto. Edu Bedia relevó a Raúl Guti y Barrera lo hizo con Buff, recuperado ya de sus molestias en un tobillo.