Lo mejor desde Gerona

El Zaragoza rubricó en Elche su más rotundo triunfo a domicilio desde la promoción de 2015.

Así de alegre se entrenó el Real Zaragoza el pasado lunes tras regresar de Elche.
Lo mejor desde Gerona
Oliver Duch

Desde la machada histórica de Montilivi (1-4), aquel inolvidable 14 de junio de 2015, el Real Zaragoza no había obrado a domicilio un triunfo tan rotundo. Mucho había en juego en Gerona, donde el equipo del león rampante se clasificó para la segunda eliminatoria por el ascenso a Primera, ese ascenso que finalmente se escurrió ante Las Palmas por siete malditos minutos. En Elche no estaba en juego el ascenso a la élite, pero sí algo vital: la necesidad de un viraje radical para alejarse de una vez de la zona de descenso a Segunda B. Con ese objetivo subrayado tomó las riendas del equipo Láinez en sustitución de Agné. Se estrenó Láinez con un categórico triunfo en Elche, una victoria espléndida en fondo y forma, un 0-3 que representa lo mejor del Zaragoza fuera de La Romareda desde aquella maravillosa tarde que nos creímos capaces de todo tras remontar en Montilivi.

Willian José, Cabrera y Diego Rico (luego recortaría Aday) pintaron la última inmensa alegría. Ángel (2) y Pombo pusieron los goles en el Martínez Valero, tras la mejor primera parte del Real Zaragoza en este curso y en el anterior. Acaso Montilivi podría quedar como alternativa selecta a lo desarrollado en los primeros 45 minutos en Elche. El resultado al descanso plasmó numéricamente el esfuerzo y el atrevimiento de un Zaragoza sin complejos, sin ataduras, la evidencia de que hay vida y fútbol en un colectivo que había perdido el pulso, la tensión, las constantes vitales y futbolísticas.

También podría hablarse de suerte, la suerte que el Zaragoza encontró en Elche porque la buscó; pero, sin duda, el triunfo en el estreno revolucionario de Láinez resultó incontestable. Antes, el Real Zaragoza había logrado otras dos victorias a domicilio: en Vallecas y en El Alcoraz. Las dos capturas como visitante las consiguió con Raúl Agné como inquilino del banquillo aragonés. Luis Milla dirigió al Zaragoza durante las 11 primeras jornadas ligueras. Disputó cinco partidos a domicilio, sin atrapar ningún triunfo fuera de La Romareda. Los tres puntos como visitante de la etapa de Luis Milla remiten a la suma de los empates logrados en Lugo (3-3), Tarragona (0-0) y su despedida del banquillo aragonés en Valladolid (0-0).

Agné entrenó al Zaragoza desde la jornada 12 a la 30. En este margen, disputó 10 partidos como visitante en los que facturó dos victorias. También arañó un punto en Mallorca (2-2) y el que regaló el Alcorcón (1-1). Pero los éxitos a subrayar acaecieron en la guarida del Rayo (1-2) y en Huesca (2-3). En Vallecas, justo antes de Navidad, el guardameta rayista Gazzaniga obsequió al Zaragoza con un primer gol que cambiaría el partido. Después, Ángel transformó un penalti cometido sobre Xiscu. Javi Guerra acorto distancias con un gol sin trascendencia en el signo del partido. El segundo y último triunfo a domicilio de Agné también contó con la colaboración del portero rival. Herrera, guardameta del Huesca, metió al Zaragoza en el partido. Marcaron primero los altoaragoneses por medio de Borja Lázaro. Después, Herrera le abrió la puerta a Dongou y a la esperanza del Zaragoza, que después firmaría un remonte extraordinario con un gol de Ángel y otro de Dongou. Alexander González acortó distancias, pero no impidió el triunfo zaragozano.

Llevar la iniciativa

La victoria conquistada en Elche se gestó de forma diferente a las dos anteriores del actual ejercicio liguero. Esencialmente, porque respondió a la iniciativa inicial del Real Zaragoza. El equipo de Láinez no salió a esperar, sino a por el partido, a por la portería rival. Y no contó con la colaboración del guardameta rival. Los goles fueron los frutos de acciones elaboradas o, en el caso de Pombo, de un disparo con intención, aunque contara con la involuntaria colaboración de un jugador del Elche que alteró la trayectoria de la pelota. El hecho de constituir el único triunfo a domicilio sin encajar goles no significa que el Elche no creara peligro. Creó más (y más claro) que el Rayo Vallecano y el Huesca. Eso sí, los creó cuando el Real Zaragoza ya ganaba 0-3, en el más rotundo triunfo desde Montilivi, desde el día que acariciamos el cielo en Gerona.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión