A Agné no le convence jugar con defensa de cinco

El entrenador del Real Zaragoza descarta, por ahora, utilizar tres centrales y dos laterales largos y seguirá insistiendo con el 4-2-3-1.

Raúl Agné, pensativo durante un entrenamiento.
A Agné no le convence jugar con defensa de cinco
HA

¿Cómo hacer más fuerte el sistema defensivo global del frágil Real Zaragoza viajero de este curso 2016-17? Luis Milla se marchó destituido en octubre sin encontrar la fórmula. No ganó fuera de casa un solo partido por culpa del desequilibrio que padece la plantilla en el potencial que presenta en ambas áreas. Raúl Agné, su relevo en el banquillo, tampoco ha logrado hallar un mecanismo que derive en mayor eficacia del bloque zaragocista a domicilio en las tareas de contención y suma dos derrotas y un empate en el trío de desplazamientos que ha acometido desde su llegada al vestuario blanquillo.


Total, que el Real Zaragoza presenta unos números desastrosos en los primeros cuatro meses de competición fuera de La Romareda. Solo 4 puntos sumados de los 27 puestos en liza como huéspedes de nueve rivales de la Segunda División. Vallecas, este próximo domingo a las 18.00, es la décima estación de esta liga en hogar ajeno. La siguiente oportunidad para romper tan nefasta racha. Y la última del año natural, el 2016, que ya se despide para siempre camino del parón navideño. El retorno será ya en enero de 2017, en el segundo pliego del torneo. 


Agné lleva amagando cambios 20 días. Anuncia oralmente reajustes, la instauración de nuevos mecanismos que ayuden al once que esté en juego en cada partido fuera de casa a defenderse mejor de los ataques locales. Pero, salvo por las bajas forzosas de los lesionados (Marcelo Silva, Fran, Javi Ros, Edu García...), al técnico de Mequinenza no se le ha visto modificar en los trazos gruesos el sistema táctico de cabecera, el 4-2-3-1 que es su preferente. La plantilla da lo que da de sí y Agné no se lanza a cuestiones mayores que puedan afectar a matices más finos en la distribución de sus hombres sobre el campo.


Este viernes, horas antes de partir hacia Madrid para rematar el 2016 en el estadio del Rayo, Agné volvió a dejar en el aire cambios: "Igual, para ser más consistentes, tenemos que tomar otro camino", dijo en un momento de su exposición ante la prensa. Ante este nuevo guiño que podría envolver una metamorfosis sonora en el posicionamiento del equipo en Vallecas, el preparador aragonés fue preguntado directamente por la opción larvada de un cambio numerario en la composición de la línea defensiva.


¿Valora modificar el dibujo táctico y jugar con una defensa de cinco hombres, con tres centrales y dos laterales carrileros, largos? Y Agné fue rotundo en su respuesta, que es negativa... por el momento.  “No. Bueno, no digas nunca que no a nada… pero no. No voy a cambiar. No voy a ir con tres defensas centrales, con cinco atrás. No vamos a cambiar”, apuntó abiertamente sin entrar en más explicaciones. 


Ante la insistencia por saber a qué se refería con esa sugerencia de "tomar otro camino" para ser más seguros en defensa, Agné habló de cuestiones generalistas. "Para ser más consistentes tendremos que ser más duros, trabajar más en bloque, tener un mejor comportamiento defensivo. Pero no es cuestión individual. Nos falta más armonía, más sintonía en el juego colectivo", explicó. En Vallecas se podrá evaluar si este tipo de requisitos tácticos que Agné pide a sus hombres experimentan o no la mejoría que un triunfo fuera de casa requiere. Aprobar o suspender la asignatura lo reflejará el marcador final. En definitiva, para lo bueno y lo malo, el fútbol moderno se trata de eso: ganar o no hacerlo.


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