Dongou, Isaac y Xumetra han comenzado la mañana del jueves incorporados al equipo, llevando a cabo la primera fase del entrenamiento con el resto del grupo para satisfacción del área médica, de los fisioterapeutas y del cuadro técnico. Los tres provienen de la enfermería, cada uno de un tipo de lesión diferente y con un tiempo de convalecencia bien distinto en cada caso, pero la casualidad ha querido que, al unísono, puedan empezar a asomar a la normalidad en un momento idéntico.

Observar cómo el delantero Dongou, el lateral Isaac y el extremo Xumetra ya son capaces de engranar en un primer tramo de ejercicios físicos con el resto del equipo, anuncia su reaparición cada vez más próxima, sobre todo de los dos primeros. Es un primer paso, que irá alternando este tipo de intersección en la dinámica del grupo con algunos momentos a solas en manos de los fisios.

Dongou ha sido baja desde el 6 de agosto, en mitad de la pretemporada, cuando estuvo a punto de romperse fatalmente la rodilla en Vitoria, en un amistoso ante el Alavés. La cosa quedó en un fortísimo esguince del ligamento lateral interno, de grado 3 (el más severo), pero sin rotura. Ahora, tres meses más tarde, según los tiempos de rehabilitación de estas lesiones, el ariete camerunés está cerca de pasar a ser un 'refuerzo' para la línea delantera que conforman Ángel y Juan Muñoz en su ausencia.

Lo de Isaac y Xumetra es más reciente. El lateral diestro andaluz padeció una rotura de fibras en el sóleo de la pierna izquierda, en el gemelo, el pasado día 13 de octubre, tras perder en Sevilla y en puertas de recibir al Elche. Se previó un periodo de tres semanas para que volviese a engranar con el equipo y ese tiempo se ha clavado al máximo. Este 3 de noviembre se cumplen esos 21 días. Así que al carrilero gaditano solo le queda por delante la puesta a punto para poder volver a las convocatorias.

Por último, el extremo catalán Xumetra, sorprendió negativamente, la semana pasada al regreso de Valladolid, al diagnosticársele una fractura del peroné por encima del tobillo que viene dañado desde septiembre, cuando una fuerte entrada de un rival del Alcorcón lo apartó de la normalidad durante cinco partidos, en los que estuvo ausente. El gerundense tendrá que ir con mucho más cuidado y lentitud, pues se trata de la solidificación de esa rotura ósea, algo que necesita máximo cuidado y un tiempo prudencial. En principio, se estableció un tiempo de baja de alrededor de dos meses, lo que dejaría a Xumetra fuera de juego hasta las fechas navideñas. Por eso, su presencia en esos ejercicios físicos del inicio de la mañana de este jueves ha sido la más sorprendente.