Ros, a repetir puntería
El centrocampista del Real Zaragoza, que recupera la titularidad frente al Alcorcón, marcó su único gol como blanquillo el curso pasado a los madrileños.
No es el gol una de las funciones básicas de Javi Ros en el entramado táctico del equipo. El centrocampista navarro está para otras cosas más importantes cuando ejerce sobre el campo. Pero, de vez en cuando, ve puerta. Cada temporada, en su trayectoria personal, ha firmado varios goles en los equipos donde estuvo. Este sábado, en la 5ª jornada, Ros será titular por primera vez en liga en el renovado Real Zaragoza de Milla y, curiosamente, lo hará ante el Alcorcón, el rival al que le metió el único tanto como zaragocista, el que anotó en el curso pasado en los pocos partidos con los que estrenó su andadura en las filas aragonesas.
Es, por lo tanto, un aliciente más para el retorno al once inicial del dinámico medio tudelano. Tiene la oportunidad de repetir acierto, de volver a ensayar su puntería ante los marcos contrarios. En el curso pasado, el Real Zaragoza ganó 3-1 a los alcorconenses. Ros y un doblete de Dongou dieron forma al guarismo aragonés. El tanto de Ros llegó en la primera parte y abrió brecha. Significó el empate a uno en el minuto 21 de partido, después de que los visitantes se hubiesen adelantado 0-1 con un de Páez. Fue un disparo seco, en el pico del área, ya dentro, que superó a Dmitrovic tras un pase de Lanzarote al espacio. El serbio es el mismo portero del Alcorcón que jugará de nuevo, meses después, en La Romareda.
Fue el único día en el que Ros pudo celebrar un tanto propio, aunque en la primera vuelta ya había consumado dos con la camiseta del Real Mallorca. Porque, hay que recordar, Javi Ros vino al Real Zaragoza en enero, en el mercado invernal, y solo disputaría por este motivo 16 partidos como zaragocista en los últimos cuatro meses y medio del torneo liguero.
El medio centro blanquillo tiene el honor de haber anotado, probablemente, el gol más bonito de la pretemporada zaragocista en este verano que ya se acaba: el primero al Teruel, en Pinilla, con un derechazo desde más de 30 metros que entró como un obús en la portería local tras tocar ligeramente en el poste y haber superado sin remedio al guardameta turolense. Fue, de manera paradójica, la antesala de su peor incidencia estival, ya que apenas tres minutos después, en un mal giro, sufrió el dolor en el talón que, aquel día provocó su cambio prematuro a la media hora y, posteriormente, con el paso de las semanas, ha derivado en la fascitis plantar que ha mermado sus prestaciones en el arranque de la competición y lo ha apartado del equipo titular hasta hoy.
