Tras el decepcionante e incomprensible final de la temporada pasada parecía inevitable que la plantilla del Real Zaragoza sufriera un gran cambio durante el verano. Ya lo advirtió el director deportivo del club aragonés, Narciso Juliá, tras la debacle de Palamós: "Habrá un nuevo entrenador y probablemente bastantes jugadores nuevos. A algunos jugadores les propondremos la no continuidad, en algunos casos por falta de rendimiento y en otros por regeneración, porque cuando algo no ha funcionado hay que cambiar cosas".

Así ha ocurrido. Se marchó Lluís Carreras, llegó Milla y tan solo ocho jugadores han continuado en la plantilla: Cabrera, Isaac, Erik Morán, Wilk, Javi Ros, Lanzarote, Ángel y Dongou. El resto han salido, bien porque finalizaron sus cesiones, porque quedaban libres -o se ha llegado a un acuerdo para su desvinculación- o porque han sido cedidos a otros equipos.

Varios de ellos han acabado en Primera División, como ha ocurrido con los porteros Manu Herrera (Betis) y Óscar Whalley (Sporting), aunque ambos llegan con un rol secundario. Más protagonismo están teniendo en la máxima categoría Diego Rico con el Leganés y Jaime Romero con el Osasuna, al que también ha llegado el exzaragocista Javi Álamo. 

Al extranjero se han marchado Hinestroza, que jugará en el Santos Laguna mexicano, mientras que el zaragozano Jesús Vallejo lo hará en el Eintracht Fráncfort alemán, en este caso cedido por el Real Madrid, club al que pertenece. 

La mayoría, sin embargo, seguirán jugando en Segunda División. Dorca y Pedro lo harán en el Elche, donde también coincidirán con el exzaragocista Eldin Hadzic, mientras que Diamanka está a las órdenes del aragonés Fernando Soriano en el Almería.

Abraham, que por su alta ficha no cuadraba en el presupuesto del Real Zaragoza, ha sido cedido al Levante, uno de los favoritos al ascenso, con el que ha jugado ambos partidos. 

Culio, que llegó a La Romareda el pasado mes de diciembre y apenas jugó por una lesión, llegó a un acuerdo con el club blanquillo para rescindir su contrarto y firmó por el Mallorca, mientras que Guitián, al que Narciso Juliá quería renovar, decidió apostar por el Valladolid. Jorge Díaz jugará cedido en el Reus, donde coincidirá con Campins, lateral que reforzó la zaga zaragocista en el último mercado invernal. 

Los veteranos Rubén González y Marc Bertrán, por su parte, se encuentran sin equipo, mientras que han sido varios los canteranos que han decidido marcharse a equipos de Segunda B: Tarsi Aguado (Bilbao Athletic), Adán Pérez (Navalcarnero), Diego Suárez (Burgos) y Jorge Ortí (Cultural Leonesa). 

Por su parte, Sergio Gil, que no dio por válida la renovación de su contrato y decidió desvincularse de forma unilateral, acabará jugando en el Lugo.