Cuatro vías de solución para el agobio económico

El presidente Lapetra indica los caminos por los que el Consejo de Administración intenta hacer viable la SAD desde el atolladero de la Segunda División.


Día uno del tercer verano de los patronos de la Fundación Zaragoza 2032 al frente de la gestión del Real Zaragoza. Objetivo primero y supremo: salvar a la SAD de una parálisis financiera que derive en una letal falta de liquidez y, por consiguiente, la liquidación. Transcurridos los tres años consecutivos en Segunda División que se pactaron por parte de la anterior propiedad, la de Agapito Iglesias, como causa suspensiva del pago de la deuda a los 350 acreedores que incluye el convenio del concurso de acreedores en el que derivó el club hace un lustro, el 1 de julio se activa inexorablemente el pago de los primeros millones (una media de 8 por año durante los próximos 8 años). Y este detalle cambia radicalmente el plan de vida del Real Zaragoza, que necesita una inyección de dinero con el que poder hacer frente a unos gastos muy superiores a los que han tenido que responder los dueños de la mayoría accionarial de la SAD en los últimos dos cursos en los presupuestos ordinarios.


Ante este mandato del día a día societario, Christian Lapetra, el presidente del Consejo de Administración del club, ha explicado que los regentes de la entidad van a intentar recaudar esa cantidad extra que reclama el nuevo statu quo del Real Zaragoza a partir del inicio del próximo mes a través de cuatro vías de ingresos diferentes que, desde este lunes, ya están en marcha.


La primera es el incremento de los patrocinadores del club. La segunda, la renegociación de diversas deudas de las muchas que tiene pendientes la sociedad. La tercera es la venta de activos, en este caso, cabe decir jugadores por los que obtener un traspaso. Y, por último, el cuarto epígrafe hace referencia a la búsqueda de financiación a través de nuevos inversores que quieran incorporarse al proyecto del Real Zaragoza.


Estos dos últimos casos son los más decisivos por el monto global de dinero que pueden acabar aportando desde sus respectivos grifos a las necesidades de caja del club zaragocista. En la línea de conseguir dinero a través de la venta de jugadores, si el año pasado ya se ejecutó el traspaso de Vallejo al Real Madrid -ha jugado cedido este año por el club merengue, hecho que se pactó en el momento de consumar aquella operación- por una cantidad cercana a los 6 millones de euros (que incluía al portero canterano Darío), este año se cuenta con las opciones de obtener 'cash' a través de las operaciones de salida de los defensores Rico y Cabrera.


Y, como compuerta mayor, por la que debería llegar la más importante aportación a las arcas de la SAD, está subrayada y escrita en negrita la llegada de nuevos inversores. Una circunstancia que podría variar el rostro de la actual propiedad y de la que Lapetra no ha dado ningún detalle más allá de nombrarla.

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