Rubén: "El de Palamós es un partido con trampa"

Relajación cero. El vestuario del Real Zaragoza combate cualquier efecto nocivo que pueda derivarse de una actitud contemplativa respecto del partido que el equipo aragonés juega el sábado en Palamós (20.30) ante el Llagostera, rival ya descendido a Segunda B y que, por ello, no pone nada en juego. Rubén González, uno de los veteranos de la caseta, portavoz del equipo este jueves, ha dejado muy clara la postura de los de Carreras ante esa tentación que, por otra parte, sí que parece extenderse en una parte del zaragocismo. No se ve con buenos ojos que haya gente que dé el choque por ganado y que ya se estén barajando quinielas sobre los rivales y las preferencias para la posterior fase de promoción de ascenso a Primera.

"El campo del Llagostera no es nada sencillo. De hecho, ellos han sumado el 95 por ciento de sus puntos jugando en su casa. Eso dice mucho. Es un terreno complicado, donde las condiciones no suelen ser como las de La Romareda, por ejemplo. Y ellos, a pesar de estar descendidos, no nos lo van a poner nada fácil porque, ahora mismo, se han quitado la presión que tenían encima. Para sus jugadores va a ser un escaparate para poder reivindicarse y poder demostrar que es injusto su descenso. Es un partido con trampa", ha advertido Rubén con enfasis.

El defensa gallego ha reincidido en la importancia que tiene, en las horas previas, el hecho de dotar a este partido final de la liga de la trascendencia que merece desde el prisma del Real Zaragoza. "Estoy de acuerdo en que estamos en la obligación de ganar, pero sería poco entendible que no respetásemos al rival. Nosotros no vamos a viajar allí y, antes del sábado, vamos a tener el partido ganado por ser el Real Zaragoza. No es así. Y este rival está herido en su orgullo y querrán despedirse con buenas sensaciones. Ellos se juegan cero y eso lo hace más complicado para nosotros", argumenta Rubén.

El equipo de Carreras, además, viene avisado después de tres pinchazos consecutivos fuera de casa en campos pequeños, similares al de la Costa Brava, y ante adversarios de la zona media-baja de la clasificación. El Real Zaragoza ha enlazado patinazos en Ponferrada, Soria y Huesca que, de repetirse en Palamós, sería esta vez mucho más grave. "Debemos canalizar la presión en positivo, para que nos sirva y no nos moleste. Esa es la tarea previa al partido. Lo que ya ha pasado, como es lo que pasó en esos tres partidos anteriores como visitantes, ya no lo puedes cambiar. Es momento de avanzar, no de mirar atrás. Estamos en la obligación de aprender de las situaciones que hemos vivido", razona Rubén en este sentido.

Por último, el central compostelano asegura que ve al grupo "bien, alegre y comprometido" ante los partidos decisivos, que como mucho serán cinco -contando la promoción- y que deben concluir con el Zaragoza en Primera. "También estamos bien en el apartado físico, aunque a estas alturas las piernas ya estén muy cargadas. En las últimas jornadas, el equipo llega a los últimos minutos de los partidos con energía", ha destacado el '5' blanquillo.