El ascenso directo todavía es posible para el Real Zaragoza, pero la realidad planta cara a los pronósticos de los más optimistas. Tras la dura derrota frente al Nástic, el conjunto blanquillo se queda a cinco puntos del Leganés, segundo, y a cuatro de su rival de este domingo, con el que además tiene perdido el 'golavarage'. Con nueve puntos en juego, las opciones de los blanquillos pasan por un pleno de victorias en las tres últimas jornadas y que tanto Leganés como Nástic al menos pierdan un partido y empaten otro.

Difícil carambola, y más cuando al Real Zaragoza le esperan enfrentamientos exigentes, como el del próximo jueves ante un Huesca que quiere sellar la salvación o el del domingo ante el Oviedo, otro rival directo en la también disputada lucha por el 'play off'. Parece que éste es ahora el objetivo de los blanquillos, que ya ven lejos el ascenso directo y quieren asegurar cuando antes la promoción. Y, si es posible, obtener el mejor puesto posible para enfrentarse al rival más asequible y tener el factor campo a favor.

El propio Guitián, autor de la polémica jugada del penalti, en la que el defensor ni siquiera tocó el balón con el brazo, reconocía que el equipo debe replantearse su objetivo para este tramo final de la Liga Adelante. Tras la derrota, el cántabro reconocía que “el ascenso directo se ha escapado” y el nuevo objetivo es “ganar los nueve puntos” para asegurar “el mejor puesto para el 'play off”.

Carreras, por su parte, no ha querido hablar de objetivos más allá del partido en El Alcoraz. “Cómo vamos a pensar en el Oviedo o el Llagostera si tenemos antes un partido ante el Huesca. Cada vez que lanzamos las campanas al vuelo nos llevamos un hachazo”, ha indicado el entrenador.