El presidente de Brasil, Michel Temer, decidió este sábado participar en el homenaje colectivo que se rinde en el estado de Chapecó a las víctimas del accidente aéreo de Colombia, pese a que inicialmente se había anunciado que sólo acudiría al aeropuerto de la ciudad para recibir los cuerpos.

"No podía decir que iría al estadio porque la Seguridad colocaría pórticos y revisaría a las personas. Solo lo comuniqué ahora para facilitar la vida de todos", dijo este sábado Temer.

La decisión de participar en el funeral colectivo a las víctimas se produce después de que los familiares de algunos de los jugadores fallecidos en el accidente criticaran al presidente brasileño.

"La obligación de él es venir aquí para traer un sentimiento hacia nosotros, no ir yo allí. En un futuro, de repente hasta lo va a usar como una propaganda, no sé si él o el partido", lamentaba el viernes Oscar Machado, padre del defensa del Chapecoense Felipe Machado, uno de los 19 jugadores del club que perdieron la vida en el accidente.

Medios locales apuntaron en las últimas horas que Temer había decidido no presentarse en el estadio del Chapecoense para evitar posibles abucheos o críticas contra su Gobierno, volcado en la aprobación de recortes y salpicado por los escándalos de corrupción. "Si tiene dignidad y vergüenza, que (Temer) venga aquí (al estadio) a rendir homenaje a las personas", dijo anoche Machado al canal ESPN de televisión.

El avión que conducía al Chapecoense a Medellín para jugar la final de la Copa Sudamericana se estrelló en la noche del lunes y dejó 71 muertos, entre ellos 19 jugadores, gran parte de la directiva y el equipo técnico del club, y 21 periodistas.

Los restos de las víctimas llegaron este sábado a Brasil para recibir sepultura en medio de múltiples homenajes, el más numeroso en Chapecó, donde miles de personas desafían a la lluvia para despedirse de sus "eternos campeones".