La Real Federación Española de Fútbol (RFEF) ha reunido este lunes en la sede del organismo en Las Rozas a los presidentes de los clubes de Primera División para debatir la posibilidad de que la Supercopa de España se juegue en Pekín (China) en al menos cinco de las siete próximas ediciones, y en la que sólo los presidentes del Real Madrid, Florentino Pérez, y del FC Barcelona, Sandro Rosell, se han mostrado en contra de llevar a cabo la iniciativa.

Así lo mostró el propio presidente de la entidad azulgrana antes de entrar a la reunión, cuando respondió a las cuestiones de los periodistas sobre su opinión sobre que la competición se celebre en China con un escueto "no lo vemos".

Aunque no han trascendido casi detalles de la reunión, el presidente del Atlético de Madrid, Enrique Cerezo, ha confesado que tanto el presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, como el del FC Barcelona, Sandro Rosell, mostraron su disconformidad con que la Supercopa pudiese disputarse en China.

"Creo que a la mayoría de los equipos nos interesaría jugar una Supercopa en China, pero hay dos equipos, Real Madrid y Barcelona, que no estarían interesados. Se va a hacer una junta de la Federación para ver qué se decide en relación a este tema", declaró Cerezo.

"Son dos partidos que uno indiscutiblemente lo juegas en casa, y ese es el único problema que puede haber. Es una cuestión económica: vamos a ganar mucho más dinero jugándola allí que jugándola en España", añadió.

La reunión estuvo presidida por Ángel María Villar, presidente de la RFEF, acompañado del vicepresidente 1, Juan Padrón; el secretario general, Jorge Pérez, y el presidente de la Liga de Fútbol Profesional y vicepresidente de la RFEF, José Luis Astiazarán.

Tras exponer Villar la historia y las causas que dieron origen a esta competición y los distintos formatos que ha tenido, el secretario general explicó las características del convenio firmado con la empresa china United Vasen Sports, organizadora de eventos deportivos en Asia. Tras un largo debate, en el que intervinieron los presentes, será la Junta directiva de la RFEF la que tome una decisión al respecto.