El Zaragoza castiga a Paredes

El Real Zaragoza anunció ayer su intención de castigar a Javier Paredes, después del incidente protagonizado entre el jugador y el técnico, José Aurelio Gay, durante el entrenamiento del pasado jueves. El club no desveló las medidas adoptadas, aunque todo apunta a una elevada multa para el defensa asturiano.

La entidad aragonesa expresó su postura a través de un comunicado: "La Dirección del club ha decidido, en la mañana de hoy (por ayer), solicitar a sus servicios jurídicos que se inicien los trámites para la apertura de un expediente disciplinario", informaba la nota oficial.

Aunque el Real Zaragoza no descarta la posibilidad de apartar nuevamente al jugador, todo podría quedar en una importante sanción económica. Al menos de momento, siempre que Paredes no vuelva a ofrecer cualquier indicio de indisciplina, desinterés o falta de implicación.

En principio, el club no tiene previsto adoptar medidas drásticas. La intención es que el defensa, que finaliza contrato en junio de 2012, continúe trabajando con el resto de sus compañeros aunque no tenga ninguna opción de entrar en las convocatorias. El asturiano no entra en el ideario del técnico, tal y como le comunicó el club al finalizar la pasada temporada, y no volverá a vestir la camiseta del Real Zaragoza. Ni siquiera la escasez de recursos de la plantilla, muy reducida de efectivos, modificará la decisión tomada en su día por el entrenador.

Gay ya evidenció sus intenciones en el entrenamiento vespertino del pasado jueves, durante el partido de preparación ante el filial: sin Obradovic, concentrado con la selección de Serbia, y sin Leo Ponzio, lesionado, el técnico optó por alinear a José -un futbolista de la cantera- en el lateral izquierdo. Y Paredes comenzó el partido en el banquillo, muy molesto con la decisión adoptada por el entrenador. Sin embargo, el desencuentro entre Paredes y Gay permanece latente desde el inicio del verano, cuando el jugador fue apartado del grupo durante toda la pretemporada, junto a Marko Babic y Franck Songo'o.

El conflicto se acentuó el pasado jueves, cuando Paredes saltó al terreno de juego. Gay trató de corregir las desatenciones del jugador, que había perdido el sitio en dos acciones prácticamente consecutivas. Después, el defensa realizó dos entradas desmedidas a un futbolista del filial, y finalizó el entrenamiento exhibiendo su malestar con airadas protestas y ademanes furiosos. Incluso, mientras sus compañeros se disponían a iniciar los estiramientos, Paredes golpeó con rabia un balón, enviándolo fuera del campo.

Intercambio de reproches

Gay le recriminó al jugador su comportamiento, y entonces todo estalló: el defensa, que llegó a encararse con el técnico, elevó su tono de voz y ofreció una actitud cada vez más furiosa, aunque el intercambio de reproches resultó inaudible desde la grada. La rápida intervención de Gabi, quien se interpuso entre ambos, evitó que el incidente pasara a mayores.

Paredes, que ayer volvió a ejercitarse con el grupo, deberá asumir una multa de régimen interno. El Real Zaragoza, en este sentido, ha actuado con rapidez y determinación. Nada que ver con anteriores conflictos, donde la autoridad del entrenador había quedado seriamente comprometida, expuesta a futuros actos de indisciplina. En este caso, fue el propio técnico quien solicitó la sanción del futbolista, el jueves por la tarde, durante una conversación con los máximos dirigentes de la entidad. El club, desde el primer momento, optó por respaldar a su entrenador.

Mientras, Babic y Songo'o tampoco volverán a jugar en el Real Zaragoza. Los futbolistas siguen sin alcanzar un acuerdo para abandonar el equipo, pero el club aragonés tiene previsto afrontar sus despidos la próxima semana, una vez que Songo'o regrese de su concentración con Camerún.

El jugador deberá asumir una multa de régimen interno por el enfrentamiento que mantuvo con el entrenador durante el entrenamiento del jueves