MOTOR

El desprecio del vértigo

Un puñado de los más destacados pilotos de ?freestyle?, con Torronteras y el ?Loco? Miralles al frente, se citan el sábado en el pabellón Príncipe Felipe.

El piloto José Miralles ejecuta un salto durante una cita de 'freestyle' en la plaza de toros de Zaragoza.
El desprecio del vértigo
HERALDO

Un puñado de los mejores especialistas de 'freestyle', un escenario singular -el pabellón Príncipe Felipe- y el jucio del público. Es el cóctel que preparan la empresa Motorfly y el Ayuntamiento de Zaragoza para el próximo sábado, día 25, a partir de las 21.00.


Pilotos de la talla de Edgar Torronteras o José 'Loco' Miralles vuelven a la capital aragonesa para deleitar a los amantes de las piruetas imposibles, de los vuelos admirables sobre las dos ruedas. La cita, que había adquirido un cierto hábito en la plaza de toros, cambia de escenario y se desplaza al pabellón Príncipe Felipe. Lo explica Fernando Train, el impulsor: «Llevamos haciendo actividades de 'freestyle' en Zaragoza y su entorno desde hace siete años. Ahora nos ha surgido la posibilidad de llevar a cabo esta iniciativa en el pabellón Príncipe Felipe, que nos ofrece unas condiciones muy buenas y lo vamos a llevar a cabo aquí. Era una oportunidad, una mejora con respecto a la plaza de toros».


¿Qué se va a ofrecer al aficionado a las motos? Train anuncia la presencia de un puñado de lo más granado del panorama nacional de esta especialidad: Torronteras y Miralles, además de Víctor Córdoba -«capaz de todo»-, Dylan Trull y los más jóvenes Miguel Espadas, Abraham Espadas y Richard Pit Bike. «Es lo mejor de nuestro país, con nivel internacional. Desde hace unos años, esta modalidad está en continuo cambio; los motoristas convierten en realidad lo que parece imposible y cada año inventan un salto nuevo».


Es el cartel de presentación de un espectáculo cuyas entradas ya están a la venta por 18 euros para adultos y 12 para niños en distribución anticipada.


Francisco de Jorge, director de la prueba, destacaba en la presentación el carácter competitivo de la prueba. Es verdad que no forma parte de un circuito nacional, pero la cita no es un mero espectáculo, es una competición.

El director quiso destacar la espectacularidad de José Miralles, tercero en el último Campeonato del Mundo y tercero también en el Europeo. «Es un momento, además, de crecimiento, con pilotos que salen al extranjero. Hay cerca de noventa licencias, que son muchas, porque el control es muy importante: deben ser pilotos que procedan del motocross o del supercross».


Las actuaciones de los pilotos se someten al criterio de los jueces. Pero los promotores quieren implicar de forma decisiva al público: «En la final -señala Fernando Train- será el público el que, con sus aplausos, establezca el orden en el podio. Esta es una modalidad muy participativa y los pilotos se crecen con el público».


La cita, el próximo sábado, día 25, a partir de las 21.00, en el pabellón Príncipe Felipe. Donde no existe el vértigo.