El Balonmano Aragón logró una victoria vital en sus intereses para evitar el descenso y lo hizo de manera agónica, con una parada del meta Julio Rodríguez en el último segundo que salvó a su equipo del empate.

Antes, el encuentro había vivido dos partes muy diferentes con una primera en la que los propietarios del terreno avasallaron a su rival, pero una segunda en la que una gran reacción del conjunto burgalés llegó incluso a darle la vuelta al marcador en una única ocasión y que se decidió en un final de los que está protagonizando el equipo maño esta temporada, de infarto.

El conjunto aragonés inició el partido de manera espectacular, con una gran defensa que ahogaba las ideas ofensivas del conjunto arandino que tenía muchos problemas para encontrar huecos y se veía obligado a lanzar en muchas ocasiones con la amenaza de pasivo de los colegiados.

La solidez atrás del equipo maño, con un Julio Rodríguez que sumó diez paradas en el primer periodo, unida al acierto en los lanzamientos de Demetrio Lozano y Del Valle y a la efectividad del pivote Alberto Val, permitió tomar ventajas desde el principio del partido y obligó al técnico visitante, Jacobo Cuétara, a pedir dos tiempos muertos con apenas cinco minutos de diferencia (min.9 y min.14), éste último cuando los locales gozaban de siete tantos de renta (11-4).

El Villa de Aranda se empecinaba en jugar casi únicamente para su pivote Moreira, pero los locales lo tuvieron bien controlado y eso impidió cualquier tipo reacción.

Ésta, sin embargo, llegó a la vuelta de vestuarios. El BM Aragón comenzó a cometer errores en ataque que no había hecho en los primeros treinta minutos y esto, unido a una defensa 5-1, que en muchos momentos se convertía en 3-2-1, muy efectiva supuso que los castellano-leoneses fueran recortando distancias paulatinamente.

El acierto de Cabanas, Maestro y Patrianova (cuatro goles cada uno de ellos) tuvo mucho que ver, pero también el cansancio de los veteranos del equipo zaragozano, lo que hizo que el conjunto burgalés llegara a colocarse por delante (26-27) por primera y única vez en el minuto 53.

El orgullo local, unos buenos últimos minutos defensivos y un gran Julio Rodríguez en el segundo tramo de este periodo, con una parada final a tiro de Patrianova, acabaron por decantar el partido para un BM Aragón que cree cada vez más en la salvación.

Ficha Técnica:

31 - BM Aragón (18+13): Julio Rodríguez (Olano, p.s.); Sorli (3), Val (6), Del Valle (7,2p), Camas (1p), Álvaro Ferrer (2), Sergio García (-), Demetrio Lozano (7), Millán (2) y Ariño (3).

30 - Villa de Aranda (12+18): Santana (Xavi Díaz, p.s.); Cabanas (4), Redondo (1), Camino (1), Beltza (1), Javier Muñoz (2,1p), Roberto Sánchez (1), Megías (5), Moreira (4), Matheus (1), Maestro (5), Lazic (-) y Patrianova (5).

Arbitros: Juan José Gude Prego y Carlos Javier Gude Prego (Federación Vasca). Excluyeron por dos minutos a los locales Sergio García, Val (2) y Lozano y a los visitantes Redondo (2), Javier Muñoz y Cabanas.

Incidencias: partido correspondiente a la jornada decimoctava de la Liga Asobal disputado en el pabellón Siglo XXI de Zaragoza ante unos 800 espectadores.

Marcador cada cinco minutos: 3-0; 7-4; 11-5; 12-7; 15-9; 18-12 -descanso- 20-16; 21-18; 24-22; 26-24; 27-27; 31-30.