El entrenador del CAI Zaragoza, Joaquín Ruiz Lorente, ha señalado que su rival del próximo miércoles en la Eurocopa de baloncesto, el Krasny Oktyabr Volvogrado, es un equipo "con bastante potencial defensivo y un poco anárquico en ataque".

"Es un equipo físico sobre todo, con gran poder defensivo, con gente grande y fuerte y bastante intenso. Suele hacer muchos cambios en defensa y en ataque quizá sean irregulares ya que nunca sabes por dónde pueden salir. Cuenta con jugadores conocidos como Cuthbert Victor, que jugó con nosotros, Lamont Hamilton o Romeo Travis que es un jugador de mucha calidad", ha analizado el preparador "caísta".

El técnico del conjunto aragonés ha destacado que "sorprendentemente" ha perdido los dos partidos que ha jugado hasta ahora porque parecía que era un equipo, a priori, "más competitivo".

Para Ruiz Lorente esto supone que el encuentro del miércoles en terreno ruso sea "trascendental" para el Krasny porque de perder en casa sumaría tres derrotas seguidas y "pocas posibilidades de pasar a la siguiente fase".

"Por lo tanto es un partido muy importante para todos pero para ellos especialmente", ha subrayado el técnico del CAI Zaragoza, que ha añadido que, por este motivo, el conjunto ruso tendrá "la máxima concentración y la necesidad imperiosa de ganar".

También ha apuntado que "nunca" se va relajado a jugar un partido pero que, evidentemente, en esta ocasión sus hombres deben ser conscientes de que el rival se juegan mucho, de que probablemente es "su última oportunidad" y que, por ello, el CAI debe estar "al 110%".

El entrenador del CAI Zaragoza considera que el conjunto de Volvogado es un tipo de equipo que existe mucho por Europa, "con gente muy física y muy fuerte, aunque en ataque algo irregulares".

Para combatir las armas de su rival, Joaquín Ruiz Lorente cree que lo que debe hacer su equipo es "mantener el nivel defensivo y en ataque no volvernos locos".

A este respecto ha alertado de que el Krasny Oktyabr suele entrar en rachas positivas en los partidos europeos "por su agresividad, por su manera de jugar y por el apoyo del público" y que en esos momentos todavía hay que estar más concentrado, "con la cabeza más fría para saber que no hay que perder los papeles".

Precisamente a este respecto, y sobre la falta de concentración de su equipo en algunos momentos de determinados encuentros, ha explicado que es muy difícil mantenerla al máximo nivel los cuarenta minutos y que el objetivo es extenderla por el máximo tiempo posible aunque al final lo que importa es "como acaba todo".