Partido detrás de la polémica

CAI Zaragoza y Cajasol, protagonistas extradeportivos en el mundo de la canasta esta semana, se ven las caras este domingo en el Príncipe Felipe (12.15). El partido, enturbiado por la decisión del Consejo Superior de Deporte (CSD) sobre el caso Satoransky y Norel, resulta tremendamente importante para los intereses rojillos de cara a sus aspiraciones de Copa. Después de ganar la pasada jornada en la complicada cancha del Asefa Estudiantes, los zaragozanos deben hacer valer el factor local para continuar escalando posiciones en la tabla.

La visita de los sevillanos es el primero de los dos partidos consecutivos que el cuadro aragonés debe jugar al calor de su público. Oportunidad única para aferrarse al pelotón copero, ese al que los pupilos de José Luis Abós han conseguido llegar después de superar su primer bache del curso.

Cuando el CAI funciona como un bloque, parece preparado para hacer frente a casi cualquier equipo de la Liga Endesa. Así lo ha demostrado ya en numerosas ocasiones, siendo su triunfo más rutilante, probablemente, el logrado en la primera jornada ante Caja Laboral. Por ello, los rojillos buscan seguir trabajando en esa dirección. En la de potenciar la circulación de balón y el triunfo del colectivo sobre el individual. Lamentablemente, no es menos cierto que los zaragozanos han mostrado bajar su rendimiento varios enteros sin Pablo Aguilar. Después de una semana cuidándose al máximo, sin forzar en los entrenamientos, todo apunta a que el capitán estará sobre el parqué. Aunque sigue renqueante de sus molestias.

Cajasol en crisis

Si la dinámica emprendida por los aragoneses es positiva, en Sevilla las sensaciones son diametralmente contrarias. Con una victoria en siete partidos, Cajasol es la gran decepción del comienzo liguero. Dirigidos por el incombustible Aíto, para José Luis Abós “el mejor entrenador español”, los andaluces no han encontrado todavía el tono a la competición. Especialmente cuando se alejan de su pabellón, donde acumulan tres derrotas por una diferencia media de 23 puntos. Mayor que si, por ejemplo, no se hubiesen presentado.

Que no levanten cabeza es la misión. No en vano, a pesar de que hasta la fecha no hayan funcionado, fiarse sería un gran error. En lo que a individualidades se refiere, la plantilla hispalense posee jugadores sobradamente contrastados. Calidad en estado de hibernación que podría despertar en cualquier momento. 

Destacan así nombres como Luka Bogdanovic, John Holland, Juan José Triguero o, sobre todo, Tomas Satoransky. El checo, que promedia 11 puntos y casi cuatro asistencias por encuentro, jugará ya como jugador de formación local, a pesar de que el propio CDS confirmó en su resolución que su caso no se ajustaba al convenio acordado por la Asociación de Baloncestistas Profesionales y la ACB. Sin embargo, el joven base gozará de una prebenda negada, al mismo tiempo, a Henk Norel, quien se encuentra en circunstancias similares. 

Decisión incomprensible que ha logrado enervar al CAI Zaragoza. Furia que los rojillos esperan poder traducir en un triunfo sobre el parqué.