Víctor Lapeña se ha acostumbrado a comenzar los veranos lejos de casa. El preparador zaragozano es, desde hace una década, uno de los hombres de confianza de la Federación Española de Baloncesto, también ahora que Jorge Garbajosa es el nuevo presidente. El aragonés, que va a más de un éxito internacional por año, se encuentra ahora en la República Checa como segundo entrenador de la selección española absoluta que pelea por conquistar el oro en el Eurobasket. De momento, ya están en cuartos, donde este jueves se enfrentarán a Letonia por un puesto en semifinales.

Lapeña atiende feliz la llamada desde Hradec Kralové, la pequeña localidad checa en la que España ha disputado la primera fase del torneo, cerrada con la primera plaza del grupo gracias a los triunfos ante Hungría y Ucrania. El técnico zaragozano, que volverá a dirigir al Mann-Filter una temporada más, es feliz con la selección, un hábitat natural para él.

"Estoy muy orgulloso de pertenecer a la selección española, muy orgulloso de que el nuevo presidente y los nuevos gestores de la Federación sigan confiando en mí. Vuelvo a estar en un sitio en el que soy muy feliz, defendiendo la camiseta de la selección española. Ahora lo que tengo que hacer es trabajar y rendir a mi máximo nivel para que ellos vean en Víctor Lapeña una persona con la capacidad necesaria para liderar a sus selecciones", explica.

El aragonés ha vivido desde dentro, como protagonista directo, el fascinante proceso que ha convertido a España en una de las potencias del baloncesto mundial. Hace algo más de una década, España no era nadie en el baloncesto femenino y hoy es la segunda en el ranking mundial. Por el camino, una plata en los Juegos Olímpicos, otra en el Mundial y cuatro medallas más en los Europeos, entre ellas un oro. Y en todos estos éxitos, Víctor ha sido parte fundamental desde el cuerpo técnico.

En total, sumando sus triunfos como preparador de las categorías inferiores, el aragonés suma doce medallas internacionales con España. Y ahora busca la decimotercera. "Nos hemos ganado el respeto de todos los rivales. Desde el 2001 hasta ahora, solo en el 2011 España no ha subido al pódium en el Europeo. En los últimos años, hemos conseguido un estatus que nos coloca como la segunda potencia a nivel mundial en el ranking y eso hace que los rivales nos tengan un grandísimo respeto", desvela.

En la República Checa la historia no es diferente. Las españolas van a por todo. "Somos una selección que venimos de hacer un ciclo inimaginable. Inigualable. Dudo que se vuelva a repetir un ciclo igual que el conseguido desde el año 2013 hasta ahora. Por eso, siempre nos ponemos el listón muy alto. Sin embargo, somos muy conscientes de que para conseguir una medalla en un campeonato de Europa, tenemos que estar a nuestro máximo nivel. Si lo hacemos, somos capaces de conseguir cualquier cosa", subraya Lapeña, que señala a Francia y Turquía como los grandes rivales por el título.

La lógica invita a pensar que, después de un largo periodo como ayudante de Lucas Mondelo, el siguiente paso que le corresponde a Lapeña es ser seleccionador absoluto. Él no oculta que le seduce la posibilidad, pero también asegura que quiere seguir aprendiendo de Mondelo, al que califica como "el mejor entrenador de Europa". "Todos los entrenadores tenemos sueños y ambiciones. Por supuesto que para mí un sueño y una gran ambición sería algún día ser seleccionador español absoluto. Pero es algo en lo que creo que no debo perder ni un solo momento de energía. Estar con Lucas Mondelo es maravilloso. Aprendo cada día de él y ojalá pueda estar muchos años a su lado", afirma con humildad.

Ambición y cantera con el Mann-Filter

A pesar de que ahora está centrado en su papel con España, el aragonés no deja de trabajar en el nuevo proyecto del Mann-Filter, donde volverá a ser el máximo responsable desde el banquillo. "La próxima temporada del Mann-Filter tiene que ser la continuidad de la de hace dos años, donde pudimos hacer un grandísimo puesto. Hemos fichado jugadoras españolas con una complicidad y una identificación con el baloncesto español tremendo (Gabi Ocete, Paola Ferrari o Tamara Abalde). Va a ser una temporada muy ilusionante en la que espero que en Mann-Filter vuelva de nuevo a estar arriba y peleando por meterse en objetivos importantes como es la Copa de la Reina y el 'play off'", asegura.

Pero si con algo está ilusionado Lapeña en clave Mann-Filter es con el proyecto de cantera, que sigue dando pasos agigantados y conquistando éxitos como la reciente plata que logró el equipo cadete en el campeonato de España. "Todo lo que hacemos en el Stadium Casablanca parte de una base que es formar nuestra cantera. Tarde o temprano, el éxito de la cantera zaragozana se verá reflejado en el Mann-Filter. Cada vez estamos dando pasos más importantes y el objetivo final es ese, que el Mann-Filter un día esté, en un porcentaje muy alto, formado por jugadoras de la cantera del Stadium Casablanca, zaragozanas, aragonesas… y que todo el club y toda la ciudad se identifiquen con el equipo", proclama.

"Porque al final eso es lo bonito, que la afición venga a ver a la gente de su casa, de su tierra, que sepan que defienden los intereses de su club y de su ciudad. Y creo que lo conseguiremos. Porque vamos en la línea correcta. Solo necesitamos algo de tiempo", concluye esperanzado.