En Huesca, el Club Atletismo Huesca, Corredores Oscenses y Fundación Alcoraz llevaron a cabo la octava edición de su San Silvestre, un año más como ayuda solidaria para los Hermanos Franciscanos de la Cruz Blanca. En torno a mil participantes tomaron parte en una cita de carácter no competitivo en la que bastantes se presentaron disfrazados en la línea de salida de la Plaza Navarra durante la tarde del domingo. Los más rápidos en completar las cuatro vueltas al circuito urbano en la prueba larga fueron Antonio Orodea y Carmen Dieste.

Antes, los más pequeños habían tomado parte en la prueba corta, la de las categorías base. Ha bajado el número de corredores en este 2017, como consecuencia de que se vieron muchos atletas sin dorsal por las calles del centro de la capital oscense. Desde la organización se lamentaba profundamente este hecho. Consideran que se dio tiempo de margen suficiente para inscribirse a través de internet y, además, se abrió un plazo extra en los momentos previos para todos aquellos que no habían podido inscribirse. Se recuerda que nadie se lucra con esta carrera y que el espíritu es de diversión, de familiaridad y, sobre todo, de solidaridad. La mayoría de aquellos que corrieron sin dorsal no colaboraron de ningún modo con la Cruz Blanca. Se invita a una reflexión a quienes incumplieron con las normas éticas de una carrera sin duda especial.

En Barbastro, el jaqués Alberto Puyuelo (Floristería El Cisne) y Mónica Saludas (Hinaco Monzón) vencieron la XL Carrera de San Silvestre ‘XVIII Memorial Rubén González’, que se celebró a mediodía celebrada con una buena afluencia de corredores llegados de varia poblaciones. La prueba que comenzó a organizar la Peña Ferranca y que desde hace décadas organiza ya el Club Atletismo Barbastro (CAB) es la más veterana de Aragón en esta fecha. El aspecto lúdico, con muchos corredores disfrazados, y solidario la convierten en una prueba entrañable. Este año, el CAB entregó 400 euros al centro de ATADES Joaquín Costa en Barbastro.

Tras los vencedores entraron el foncense Armando García, ganador del año pasado, y el estadillano Javier Cabestre, ambos del Hinaco Monzón. Y en féminas, la barbastrense Marta Lasheras, y la montisonense Ana Luesma, ambas entrenadas por el campeón de Monzón Eliseo Martín.

La salida la tomaron en el paseo del Coso 366 atletas para recorrer 5 kilómetros, mientras que una hora antes lo hacían cerca de un centenar de niños en las categorías infantiles, con predominio de los corredores de Atletismo Pómez y del Club Atletismo Barbastro.

En la categoría del mejor disfraz el jurado eligió al grupo de Jedis y Darth Vader, aunque hubo propuestas muy trabajadas que también merecieron llevarse la cesta donada por Simply Sabeco como un grupo de personajes de la popular serie Juego de Tronos o dos sepulcros de abadesas del monasterio de Sijena. No faltaron como cada año disfraces alusivos a las Navidades y al final de año.

Ignacio Franco (Zoiti) y Elena Bernal (Zoiti) fueron los mejores en la edición número 29 de la Carrera San Silvestre ‘Puente Sardas’, en Sabiñánigo. Se dieron cita unos 230 participantes entre las pruebas de categorías inferiores y la prueba popular, todos con un ambiente festivo y en muchos casos ataviados de disfraces. Algunos fueron tan originales que hasta se llevaron un premio colectivo. Es lo que paso con el grupo que se denominó como ‘La estrella y bolas de Navidad’.

En Binéfar fue Alberto Susín el más rápido en completar la prueba que en este 2017 dedicaba su recaudación económica a la oenegé Clowntagiosos. En chicas fue Mónica Saludas la que ganó, repitiendo victoria después de haber salido triunfante de la San Silvestre de Barbastro. Como sucede con las carreras de este tipo, los disfraces fueron abundantes en suelo binefarense.

También en la localidad ribagorzana de Benabarre se calzaron las zapatillas para despedir el 2017. Era la tercera entrega de la prueba, con carácter lúdico y con numerosos disfraces entre los más de 150 participantes que se reunieron a las 13.00 del domingo 31.

Una de las pruebas más multitudinarias de las que se disputan en Aragón tuvo lugar un año más en Villanúa (y ya van 17). En total fueron 1.430 los deportistas de todas las edades los que disfrutaron con el ambiente festivo que envuelve a la San Silvestre, en la cual los disfraces son un elemento más para darle colorido a la tarde del 31 de diciembre. El jaqués, Alberto Puyuelo volvió a ser el más rápido en completar los 3 kilómetros de recorrido y por segundo año consecutivo ha logrado batir el tiempo récord que él mismo rebajó en 2016. En esta ocasión el Puyuelo (CA Oroel-Flores El Cisne) logró un tiempo de 8 minutos con 52 segundos, 5 segundos más rápido la anterior marca para llevarse el premio de 300 euros que otorga Turismo Villanúa, organizador de la carrera, junto con el Ayuntamiento y el Club Deportivo El Juncaral, al atleta que bata el récord. En categoría femenina, el triunfo fue para Yolanda Riera, que completó el recorrido en 11 minutos y 6 segundos.

La XVII San Silvestre de Villanúa volvió a ser una fiesta del atletismo y la solidaridad. En esta ocasión  han sido 3.500 euros los que se van a destinar a la oenegé Entarachén-Vols, concretamente para la campaña ‘Luces por Etiopía’. El Centro Juvenil Don Bosco de Mekanissa, en la capital, Addis Abeba, y el Centro de Mujeres en Desarrollo, en Zway, podrán contar con estos recursos aportados por la prueba pirenaica. “En primer lugar quiero agradecer a Turismo Villanúa y su Ayuntamiento, y a todas las instituciones y entidades que han colaborado en esta prueba, y, a todas las personas que han participado en la carrera, porque para nosotros el premio es muy importante. Es una manera de transmitir la alegría que aquí se vive y que se ha vivido en la carrera y transmitirla a los niños de Etiopía, que les cuesta muchísimo sonreír”, explicó con orgullo Antonio Rico, en representación de la oenegé aragonesa.

El alcalde de Villanúa, Luis Terrén, valoró todo lo acontecido en la 17ª San Silvestre. “Este año nos habíamos marcado varios objetivos y los hemos conseguido. Hemos mejorado la organización, la puntualidad de la carrera, la atención al corredor, la señalización... No hemos logrado llegar a los 1.500 corredores, pero nos hemos quedado muy cerca (1.430) y nosotros, viendo el ambiente, la entrega de los participantes y la mejoría en la organización, estamos muy contentos igualmente”, señaló.