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Zombis: el mito del terror que viene a por nuestros cerebros

Los no muertos que caminan despacio son cosa del pasado, ahora se llevan los infectados que corren. Dotados de esta agilidad, los zombis han saltado del cine para colonizar nuevos espacios de ficción e incluso protagonizar competiciones bizarras como las olimpiadas del Obuxofest 2010.

Zombis: el mito del terror que viene a por nuestros cerebros
Zombis: el mito del terror que viene a por nuestros cerebros
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El que crea que el Parlamento Europeo puede resolver un ataque zombi con la misma facilidad con la que soluciona una huelga de camioneros haría bien en estudiar la última vez que una plaga llegó a aquellas tierras. Un brote podría empezar con cinco zombis en Andalucía y en tres semanas haber llegado a miles en el Distrito de los Lagos de Inglaterra”. Max Brooks, en estas líneas de su libro ‘Guía de Supervivencia Zombi’, lo deja claro: con los muertos vivientes, poca broma. En los últimos tiempos, estos monstruos patosos, además de aprender a correr como galgos a por liebre, se han instalado en nuestros cerebros como nuevos mitos del terror. Y es que precisamente lo que más les gusta es comer sesos...


Los no muertos son protagonistas en el cine, la literatura, el cómic y los videojuegos. Al calor de las alarmas víricas, se han instalado en el imaginario colectivo como una amenaza plausible (quizás la próxima epidemia podría ser la gripe Z). Tal es la presencia cotidiana de los zombis, que incluso el Diccionario Panhispánico de la Real Academia le dedica una entrada al término para precisar que “debe evitarse en español la grafía ‘zombie’, que es la usada mayoritariamente en inglés, así como su plural ‘zombies”.


¿Por qué nos fascinan tanto los no muertos? Para Raúl Minchinela, el zaragozano que analiza la cultura pop desde el videoblog ‘Reflexiones de Repronto’, el poder de los seres de ultratumba reside en que “retratan nuestro mayor miedo actual”. “Hay autores que dicen que con el psicoanálisis llegó la vida interior, algo que antes era un lujo de los ricos, y surgió la idea de que cada individuo es único. Con los zombis tenemos todo lo contrario: con un mínimo contacto con esta horda dejamos de ser especiales y pasamos a formar parte de la masa. Es eso o la muerte. De hecho, morir suele estar visto como mejor solución”, sostiene el bloguero.


Para María Rubio, directora del OBuxofest, el Festival de cine Extraño y de Terror, la clave está en que los zombis “no son Gozilla o fantasmas, son seres humanos muertos; que el enemigo sea de nuestra especie da más miedo porque es más veraz”. Tanto es así que “hay mucha gente que cree en su existencia y se prepara para una invasión de no muertos”, asegura.


Parece algo disparatado, pero da que pensar que algún librero despistado coloque la ‘Guía de Supervivencia Zombi’ (editorial Benerice) entre los estantes de autoayuda. Un libro que, aunque está escrito por quien fuera guionista del programa de humor ‘Saturday Nigth Live’, da consejos tan serios como que “nada ha salvado mejor a las víctimas que la ropa sencilla, ajustada, y el pelo muy corto”. El que avisa...


Los zombis olímpicos

El Obuxofest 2010, que se celebrará del 27 al 29 de agosto en Javierrelatre, Huesca, ha incluido en su programa unas Olimpiadas Zombi, con pruebas como el lanzamiento de cerebro o la carrera desde el cementerio al pueblo. Según explica su responsable, la idea para esta competición surgió al comprobar que a los zombis del siglo XXI les ha dado por correr. “Los muertos lentos ya no daban miedo y parecían cutres, así que ahora se han convertido en infectados llenos de agilidad”, señala Rubio.


El cambio de paradigma zombi -de no muerto acartonado a infectado depredador- llegó con la película ‘28 días después’ (2002), y ha continuado en su segunda parte, ‘28 semanas después’, en la española ‘REC’ o en la reciente comedia ‘Zombieland’. Aunque el origen de estos seres está en la tradición vudú de Haití, la popularización del muerto viviente como icono del terror se lo debe casi todo al incombustible cineasta George A. Romero.


‘La noche de los muertos vivientes’ (1968) fue su primera cinta, pero el mito del zombi moderno se gesta realmente con ‘El amanecer de los muertos’ (1978). Si en la primera la crítica apreció una denuncia al racismo, la segunda, en la que buena parte de la acción transcurre en un centro comercial, fue vista como una referencia velada al consumismo de la sociedad estadounidense.


Lo zombi, además de dar miedo, da que pensar. “Los muertos vivientes, a diferencia de otros monstruos que procedían de las élites nobiliarias (Drácula) o científicas (Frankestein), son seres que vienen de abajo. El zombi es aquel que está a otro lado de la barrera y viene a por lo nuestro. Incluso su estética de persona rodeada de sangre y barro recuerda al Tercer Mundo o a las periferias pobres de las grandes ciudades”, señala Minchinela.


Alejados de vericuetos teóricos están otros zombis más pop, como Michael Jackson. Según María Rubio, el artista “debería volver para grabar ‘Thriller’ ahora, porque nos lo debe a todos sus fans”.