La reinauguración del Museo Pablo Serrano se acerca (está prevista para el día 23) y se acrecienta la polémica a su alrededor. Al desencuentro entre la familia del artista y la DGA se ha sumado en las últimas horas otro problema. La exposición 'Noreste', que aspiraba a ser uno de los principales atractivos del centro, no contará, como estaba anunciado, con la obra de Ricardo Calero. A preguntas de HERALDO, el artista, ayer, fue muy lacónico pero confirmó la noticia. «Es todo muy complejo -aseguró-, pero he decdidido no participar en el proyecto porque no ha ido todo lo fluido que yo quería y necesitaba».

Y ya no quiso comentar más su decisión. Pero la renuncia de Calero a participar en lo que aspiraba a ser uno de los eventos culturales de la década en Aragón pone de relieve las prisas -casi improvisación- con las que se ha desenvuelto el proyecto, en el que se ha empezado a trabajar hace unos meses, y que carece de cabeza visible, de un comisario.

Según la documentación del Departamento de Educación y Cultura, «'Noreste' reúne proyectos actuales de algunos de los artistas aragoneses cuya trayectoria goza de mayor reconocimiento nacional e internacional. 'Noreste' no pretende ser una exposición colectiva sino un lugar de encuentro que permita construir, desde la reflexión y el debate, la cartografía de un territorio abierto al exterior».

El primer dato que sorprende en una muestra de estas características (ocupa dos plantas del nuevo edificio, unos 1.200 metros cuadrados) es que carece de comisario. Los artistas invitados han sido seleccionados a propuesta de cinco personas, que oficialmente se les ha definido como 'grupo de trabajo': el coleccionista Javier Lacruz; la catedrática de Historia del Arte de la Universidad de Zaragoza Concepción Lomba; la directora del CDAN, Teresa Luesma; y los críticos de arte Alejandro Ratia y Chus Tudelilla.

La lista la constituyen ahora Almalé/Bondía, Lara Almárcegui, Pedro Bericat, Javier Codesal, Enrique Larroy, Begoña Morea, José Noguero, Javier Peñafiel, Enrique Radigales, Fernando Sinaga y Gonzalo Tena. Aunque algunos de ellos presentan intervenciones preparadas específicamente para el espacio, a muchos, dada la premura de tiempo con la que se está trabajando, se les han pedido obras de su colección personal u otras elaboradas para el CDAN. Según algunas fuentes, las prisas han sido responsables también de que se 'cayera' de la lista algún artista más con el que se contaba en principio para la exposición, como al parecer ha ocurrido con Roberto Coromina.

En cualquier caso, aunque la selección de los artistas ha sido responsabilidad exclusiva del grupo de trabajo, también ha causado sorpresa -incluso malestar entre muchos creadores- el hecho de que si la filosofía que inspira el proyecto es la proyección nacional e internacional de los seleccionados, no se haya pensado en figuras como José Manuel Broto o Teo González, por citar solo a algunos.

Quizá ello explique que se esté hablando ya de la continuidad de este proyecto con una segunda exposición, prevista para el mes de septiembre.