ARQUITECTURA

'Mudéjar': el lujo decorativo del legado andalusí

El Paraninfo de Zaragoza exhibe numerosas piezas, muchas de ellas aragonesas, que muestran su impronta en la cultura española.

Ventana de yeso del palacio Arzobispal de Zaragoza /1930).
'Mudéjar': el lujo decorativo del legado andalusí

"Esta muestra es sobre la cultura mudéjar, no de arte solo; el arte es un pretexto". Así de claro lo dejaba ayer Gonzalo Borrás, gran especialista en mudéjar y comisario de la exposición que se ha inaugurado en el Paraninfo de la Universidad de Zaragoza. Lo primero que Borrás quiso precisar es el propio significado de la palabra mudéjar, que alude a todo el legado andalusí que se desarrolló "bajo dominio político cristiano, en territorio de reyes cristianos".


La variada selección de piezas de la exposición, llevadas desde distintos puntos de España, tiene un primer objetivo: que el visitante "disfrute visualmente" de cada objeto. Pero, además, se aspira a que -con el apoyo del catálogo, charlas, audiovisuales y música- el público pueda "entender una estética muy distinta de la occidental, que ha venido a configurar la estética de la cultura española, tan enrarizada como la romana y la visigoda", explicó Borrás.


Una estética que, "en primer lugar, es decoración", subrayó el comisario. "Sobre cualquier material, a cualquier escala, todo está decorado", dijo Borrás. Aclaró que es así porque en la cultura islámica (y, en consecuencia, la andalusí), "la función del arte no es imitar la naturaleza, sino demostrar que Dios existe y es múltiple en lo uno y uno en lo múltiple. Y la mejor manera de mostrarlo es multiplicar los motivos decorativos en todas direcciones. Todo son imágenes de la divinidad".


Gloria a Cristo... y Alá

Hasta la expulsión de los moriscos en 1609-1610, los territorios peninsulares reconquistados por los cristianos continuaron teniendo población musulmana, que prolongó el legado andalusí porque sus artesanos siguieron trabajando tanto para sus correligionarios como para particulares y autoridades cristianos (tanto civiles como eclesiásticos).


Ello ha dejado ejemplos bellísimos y curiosos como unas puertas de la primera capilla del sagrario de la catedral de Sevilla, que se pueden ver en el Paraninfo, en cuya decoración se incluyen varias estrellas que incorporan en su interior el nombre de Alá, pese a estar destinadas a un templo cristiano.


El propio Benedicto XIII, el famoso Papa Luna, encargó trabajos para la Seo que han dejado para la posteridad piezas mudéjares como un azulejo en el que Borrás señaló la presencia de "estrellas de ocho puntas junto a las armas pontificiales: la tiara papal y el escudo de los Luna".


De la convivencia de culturas en aquella época también da fe la figura de un judío pintada sobre madera, perteneciente a la catedral de Teruel y traída del Museo Arqueológico Nacional, o la inscripción hebrea en una pieza mudéjar que decoraba una sinagoga en Molina de Aragón (Guadalajara).


Pero no solo en los edificios públicos hay muestras de este arte, y es que -como senteció Borrás- los clientes del mudéjar fueron "del rey abajo, todos". Así, el Ayuntamiento de Zaragoza conserva la decoración de un muro de una casa "de la zona del palacio de Fuenclara", en la que además de motivos como merlones escalonados y palmetas se ve representada una pareja "bajo el árbol de la vida, en una escena de cortejo".


Pero donde 'Mudéjar' muestra el máximo esplendor de este arte es en muebles, tejidos, cerámica y otros objetos que se pueden ver en el sótano, en la última parte de la exposición. Entre ellos, un trabajo en seda con técnica de tapiz traído de Huesca, escritorios con taracea en hueso hechos en un taller morisco de Torrellas, una magnífica alfombra o escritos como uno en aljamiado (castellano con aragonesismos transcrito en alfabeto árabe), traído de Novallas, que conserva "recomendaciones sobre cómo tienen que ser las relaciones sexuales entre moriscos y cuáles hay que evitar, por ejemplo debajo de un frutal", detalló Borrás.


La exposición, que estará abierta hasta el 9 de enero, ha sido posible -según remarcó Concha Lomba, vicerrectora de Proyección Cultural y Social de la Universidad de Zaragoza- gracias a la colaboración de muchas instituciones y particulares, entre ellos el Centro de Estudios Mudéjares de Teruel, el Ayuntamiento de Zaragoza, el Centro de Estudios Islámicos y de Oriente Próximo, la Fundación legado Andalusí de Granada, la Alhambra, los museos nacionales de Artes Decorativas y Arqueológico o las catedrales de Toledo y Sevilla. 'Mudéjar' cuenta también con el patrocinio del Gobierno de Aragón.

Mudéjar' se complementa con proyecciones de audiovisales (entre ellos, de Borau y Pomarón) y con la 'Música para el mudéjar' grabada para Prames por Javier Mas y Luis Delgado, y la del Grupo Cinco Siglos.