ARTE

El Museo Provincial incorpora a su pinacoteca una obra del pintor aragonés José Luzán

La obra muestra, como su propio título refleja a 'San Valero, San Vicente Mártir, San Pedro Arbués y Santo Dominguito de Val, en la Gloria', cuatro santos muy vinculados a la tradición aragonesa y pertenecientes a la "religiosidad popular".

El Museo de Zaragoza ha adquirido una obra que el pintor aragonés José Luzán realizó como boceto de la que posteriormente plasmaría a mayor escala en el armario de las reliquias de la Sacristía Mayor de la Seo de Zaragoza. Realizada en 1957, se considera dentro de su periodo de mayor éxito, y con gran influencia del rococó napolitano, donde había adquirido técnica y conocimientos.


Esas influencias serán las que transmita a sus alumnos, entre los que se encuentran Francisco Bayeu, José Beratón, Antonio Martínez, y Francisco de Goya. De hecho, esta obra se expondrá en las instalaciones del museo a partir de mayo en la colección 'Goya e Italia', ya que es una pieza clave para entender la obra de Goya y la influencia en su pintura del arte italiano, señalaron a los medios de comunicación en la presentación del cuadro la consejera de Educación, Cultura y Deporte, Eva Almunia, y el coleccionista que ha cedido la obra al museo, Félix Palacios.


La obra muestra, como su propio título refleja a 'San Valero, San Vicente Mártir, San Pedro Arbués y Santo Dominguito de Val, en la Gloria', cuatro santos muy vinculados a la tradición aragonesa y pertenecientes a la "religiosidad popular", señaló Palacios. La obra final reflejará las mismas proporciones que este boceto en óleo sobre lienzo, lo que demuestra un estudio minucioso.


La influencia del barroco tardío italiano y de Sebastiano Conca, quien fuera maestro de Luzán, está presente en la posición de figuras o en la multitud de elementos que cubren casi toda la obra ('horror vacui').


Otros elementos que identifican esta influencia son la composición escalonada de los elementos y la perspectiva utilizada, desde una posición inferior lo que se conoce como 'soto in su'. También han destacado en este aspecto la voluminosidad de las figuras dibujadas en trazados limpios creando figuras blandas.


Los cuatro santos están representados con elementos identificativos. Así, por ejemplo, al lado de San Vicente se plasma una rueda de molino que representa su martirio, y Santo Dominguito de Val, el mártir niño, se representa con la indumentaria de monaguillo que todavía utilizan los monaguillos de la Catedral zaragozana.


Es este santo el único que varía en su posterior representación en el armario de las reliquias. Si en este lienzo el niño mira a San Pedro Arbués, en la versión dimensionada el niño mira hacia delante, al espectador, y sus rasgos son más infantiles. La explicación que da la tradición es que Luzán retrató a uno de los monaguillos que ayudaban a oficiar en la misa.


Dignificar a Luzán


El coleccionista Félix Palacios admitió que hasta la adquisición de esta obra tenía a Luzán como "un gran maestro" pero de inferior talla como artista, "no lo creía capaz de realizar una obra así". dijo mirando el cuadro, "de hecho, en tiempos se pensaba que esta obra pertenecía a Francisco de Bayeu", uno de los más celebres alumnos de Luzán.


Palacios señaló que esta percepción sobre la figura de Luzán está bastante extendida; se le aprecia mucho por su faceta como impulsor de grandes artistas posteriores e introductor del barroco tardío (rococó) italiano en Aragón, y la influencia que esto tendría sobre Goya, pero "se le ha denostado como pintor".


Con la obra, a Palacios le gustaría que se ayudara a "dignificar" esta figura de gran relevancia en Aragón, que ha dejado grandes muestras de su arte en catedrales de Zaragoza, Aragón y la Rioja.


Con esta obra, la Pinacoteca del museo de Zaragoza está en condiciones de mostrar cuatro obras de José Luzán. En 2006 el museo adquirió la obra 'San José y el niño Jesús' que se sumaron a las dos que ya poseía el museo, 'El sueño de San José' y 'La Virgen María en el momento de la concepción'.