EXPOSICIÓN

El Museo Gargallo exhibe la obra de Lamolla

Conmemora los 30 años de la muerte del artistas barcelonés, reconocido como una figura fundamental para entender la cultura del surrealismo.

Exposición de Lamolla en el Pablo Gargallo
El Museo Gargallo exhibe la obra de Lamolla, figura clave del surrealismo
MAITE SANTONJA

El Museo Pablo Gargallo de Zaragoza ha inaugurado la exposición 'Lamolla. Espejo de una época', en la que se muestran las diferentes etapas de la obra pictórica de este artista barcelonés, reconocido como una figura fundamental para entender la cultura del surrealismo de los años 30 y del exilio.


Así lo ha puesto de manifiesto el director del Museo de Arte Jaume Morera de Lérida, Jesús Navarro, durante la presentación de esta exposición, con la que se conmemoran los 30 años de la muerte de Antoni García Lamolla y de la que es comisaria Lucía García de Carpi, profesora de Historia del Arte de la Universidad Complutense y una de las más reconocidas expertas en el surrealismo.


García Lamolla, nacido en 1924, es una de las personalidades más singulares del surrealismo español, con una brillante trayectoria artística que quedó truncada por la Guerra Civil y el posterior exilio y que también dejó su huella en su obra posterior.

Partes de la muestra

La exposición se divide en 3 ámbitos diferenciados, una primera en la que se refleja su pertenencia al círculo leridano de la revista Art, una publicación vanguardista en torno a la que se reunían intelectuales de la época. De esta época destacan sus depurados dibujos, generalmente retratos, y su labor paisajística.


En la segunda parte, se recogen los cuadros que pintó durante su pertenencia a ADLAN (Amics de l'Art Nou), cuyos puntos de referencia eran Joan Miró y Salvador de Dalí, y en los que quedan plasmados sus incursiones en el ámbito del automatismo rítmico, en la imaginería onírica y en el ámbito tridimensional. Fue la época más fructífera y sus obras comenzaron a exponerse en Madrid, Tenerife, Barcelona y París.


Los años de precariedad y dificultades que conllevó la Guerra Civil y el exilio acabaron de transformar su trayectoria artística, conformada por imágenes de tinte más oscuro y trágico en la que también afloran otras de carácter simbólico, algunas marcadas por un fuerte expresionismo.


De esta fase se exhiben también en la exposición algunas de las revistas del exilio español y de las que Lamolla fue uno de los principales ilustradores.


Junto a las obras de Lamolla se pueden observar también un par de esculturas realizadas por Enric Crous, editor de la revista Art, y una pintura de José Viola, así como varios cuadros de Maurice Vlaminck, reflejo de cuya amistad son algunos de los lienzos de la última etapa.


Lamolla fue también, según Jesús Navarro, uno de los grandes protagonistas de la recuperación del patrimonio artístico de la Guerra Civil que se había desperdigado por todo el territorio, al lograr salvar de "la quema" numerosas e importantes piezas de arte contemporáneo.