El día 25, Al Ayre Español ofrecerá un concierto en la sala Mozart del Auditorio de Zaragoza y, por primera vez, el día anterior abrirá las puertas de ese mismo recinto para que el público pueda asistir al ensayo general del programa, formado por tres piezas de Haydn: 'Le Matin', 'Le Midi' y 'Le Soir'.

Esta sesión especial comenzará a las 20.15 y es una experiencia nueva tanto para el grupo como para el público zaragozano, que podrá disfrutar con la música y con las explicaciones del director de Al Ayre Español, Eduardo López Banzo. «Hace tiempo que quería hacer música clásica de una manera que no fuera tan lejana a la gente», explica López Banzo, y agrega que «puede ser muy simpático que se conozca cómo trabaja Al Ayre Español» y hacerlo además con «una obra que tiene cierto intríngulis».

El director se refiere a un detalle sorprendente que él está investigando: la posibilidad de que Haydn compusiera las tres piezas tomando como referencia los sonetos de las famosísimas 'Cuatro estaciones' de Vivaldi. «Haydn era un compositor de mucho humor y es evidente que le gustaba hacer música programática, que describa imágenes: una escena de caza, una tormenta...», pasajes que se pueden identificar en 'Le Matin', 'Le Midi' y 'Le Soir' y que López Banzo cree que se corresponden con los citados sonetos. Ese nuevo enfoque, a la hora de la interpretación, «puede dar una versión muy especial», asegura el director.

De todo esto y otros detalles hablará López Banzo ante el público en el ensayo, cuyas invitaciones podrán conseguir exclusivamente los suscriptores de la edición impresa de HERALDO, recogiéndolas a partir de mañana en el Espacio Heraldo (en el paseo de la Independencia, 29, de Zaragoza) que abre las 9.30. Son localidades sin numerar y se entregarán un máximo de cuatro por suscriptor, por riguroso orden de llegada, hasta que se agoten. López Banzo asegura que los asistentes descubrirán «lo que se puede disfrutar de una partitura» y que espera que este sea «el primero de una serie de encuentros con el público». Porque está convencido de que «la música clásica es algo necesario para el ser humano».