Literatura

Javier Reverte viaja a la Guerra Civil con el general Juan Modesto

Su nuevo libro, 'El tiempo de los héroes', es una biografía novelada del único miliciano comunista que se convirtió en general del ejército republicano.

Reverte ha visitado los lugares en los que vivió Juan Modesto.
Javier Reverte viaja a la Guerra Civil con el general Juan Modesto
EFE/ROMÁN RÍOS

El último viaje de Javier Reverte no ha transcurrido por un lejano país sino por los campos de batalla de la Guerra Civil española, un territorio en el que se ha sumergido de la mano de Juan Modesto, general del Ejército Popular de la República, para escribir su nueva novela.


Un libro que ha titulado 'El tiempo de los héroes' y en el que el escritor madrileño ha construido una biografía novelada de Juan Guilloto, un personaje apenas conocido y casi olvidado, a pesar de que, gracias a su talento militar, fue el único miliciano comunista que se convirtió en general del ejército que perdió la guerra.


Quizá su nombre de guerra, 'Juan Modesto', da una pista de por qué Juan Guilloto ha pasado más desapercibido que muchos otros para la historia e incluso para El Puerto de Santa María (Cádiz), la localidad en la que nació en 1906.


Allí paso su infancia y juventud con amigos como el poeta Rafael Alberti, y se forjó primero en la lucha obrera y después en la defensa del comunismo.


El autor de libros de viajes tan memorables como 'El sueño de África' o 'Vagabundo en África' ha recorrido este jueves en El Puerto de Santa María los escenarios que marcaron el carácter e ideario de Juan Guilloto.


La casa de vecinos en la que nació, el colegio de jesuitas en el que estudió un año y medio y en el que conoció a Alberti, antes de empezar a trabajar para ayudar a mantener a sus siete hermanos pequeños como mozo de farmacia o arrumbador de una bodega, han sido las paradas de su viaje de esta mañana.


La historia de Juan Modesto le ha servido a Javier Reverte, de 68 años, para cumplir uno los retos pendientes de su carrera literaria: escribir sobre la Guerra Civil, un episodio que, aunque no vivió porque nació en la posguerra, siempre ha estado presente en su vida, dice.


"Todo país que vive una tragedia como fue la Guerra Civil tiene que escribir sobre ella", explica, mientras asegura que, aunque hay muchos libros sobre la contienda, aún no se ha escrito "una gran novela" sobre un episodio histórico que fue un "momento de catarsis de la historia española", "un drama" y también "una gran epopeya".


"Yo lo he intentado, no se si me ha salido", apunta el escritor que confiesa que para escribir la vida de Juan Guilloto ha tenido que echar mano de su imaginación porque, a pesar del peso que tuvo en la guerra, su rastro no ha quedado demasiado explícito en la historia.


Javier Reverte sabía de Juan Modesto por una canción de guerra -"me se más de veinte de un lado y de otro", bromea- pero se chocó con el personaje cuando cayó en sus manos una foto de él en el frente de Brunete, una imagen anónima que este jueves está en el archivo gráfico de la Agencia Efe y que ilustra la portada de su nueva novela.


"Me han faltado datos, es un personaje muy atractivo, con mucha leyenda detrás, pero sobre el que hay muy poco, salvo algunas referencias en textos clásicos de la guerra civil", cuenta el autor que explica que la persona que más información le aportó en su investigación fue Santiago Carrillo, con quien, meses antes de morir, estuvo charlando cinco horas sobre Juan Modesto.


Con todo lo que recapituló ha podido construir un personaje literario que le ha valido para escribir "una novela de guerra, desde el campo de batalla", un terreno "terrible" que, como periodista y corresponsal, conoció de cerca.


Un libro con el que continúa una carrera a la que no dejarán de sumarse pronto otras obras de viaje, porque ya tiene preparado otro sobre Irlanda.


Y eso a pesar de que, confiesa, los escritores, como los cineastas o los músicos, tienen cada día más dificultades para vivir de su trabajo, sobre todo por la piratería.


"No se por qué se extiende eso de que la cultura tiene que ser gratis y no la luz o el agua", asegura, mientras critica que los políticos "no se atreven" a legislar sobre el asunto.


Aunque cree que como siga así la cosa "nadie podrá trabajar" como escritor, confía en el futuro de la literatura porque "lo de menos son los medios". Lo importante, asegura, es que haya quien quiera sumergirse, desde la historia o la ficción, en la epopeya de la historia humana.