​“La Cámara de Cuentas debería tener la posibilidad de sancionar la falta de información”

La sociedad demanda cada vez más transparencia de los poderes públicos y el papel de órganos independientes como la Cámara de Cuentas resulta imprescindible para ello. En estos momentos, sin embargo, algo más de un 30% de entidades locales aragonesas todavía se resisten a presentar sus números, algo que por el momento, además, no es obligatorio.

Después de la polémica suscitada tras los últimos informes de la Cámara de Cuentas sobre el Ayuntamiento de Zaragoza o el Gobierno de Aragón, la pregunta es: ¿qué función cumple este organismo consultivo? ¿Debería tener más competencias, entre ellas sancionadoras?

De todo ello debatieron este jueves en el programa 'Tribuna Abierta' de ZTV Antonio Laguarta, presidente de la Cámara de Cuentas de Aragón; Fernando García Vicente, Justicia de Aragón; José María Gimeno Feliu, catedrático de Derecho Administrativo de la Universidad de Zaragoza y presidente del Tribunal Administrativo de Contratos Públicos de Aragón y Mikel Iturbe, director de HERALDO DE ARAGÓN. El debate estuvo moderado por la directora de la cadena, Victoria Martínez, y se redifundirá el viernes a las 15.30, el sábado a esa misma hora y el domingo a las 20.30.

Los cuatro invitados defendieron la labor que realiza este órgano y la necesidad de que siga revisando las cuentas de la Administración: “Nos remitimos a comprobar si se han cumplido los principios de legalidad, eficiencia y economía, no somos adversarios de nadie”, explicó Laguarta. “Llevamos cuatro años trabajando en esta Comunidad y se han realizado 61 informes”, añadió, al tiempo que recordó que casi todos ellos “han recogido una imagen fiel” de la situación que vive cada entidad pública: “Hablamos de información técnica, nunca política”, subrayó, al mismo tiempo que afirmó que “la Cámara de Cuentas debería tener la posibilidad de sancionar la falta de información”.

García Vicente dijo no entender “por qué una Administración no debe presentar cuentas” como, por el contrario, sí se le exige a cada ciudadano con la Agencia Tributaria. El Justicia, asimismo, reclamó que es necesario “un cambio de mentalidad global” en múltiples ámbitos de actividad económica y también destacó la labor “no coercitiva” de la Cámara de Cuentas, “una institución moderna que defiende los derechos de los ciudadanos”.

La proximidad al territorio fue otro de los argumentos esgrimidos al analizar el papel de la Cámara de Cuentas, tal y como observó Mikel Iturbe: “Esta institución era muy reclamada por los aragoneses y por derecho propio se ha ganado un hueco con normalidad. El sentir popular requiere que se controle a las Administraciones”, apuntó el director de Heraldo.

Gimeno, por su parte, sugirió que es aconsejable revisar el funcionamiento de los entes públicos en aras de un buen gobierno. “La Cámara no tiene una función coercitiva sino de auctoritas, didáctica. A veces, sin embargo, hace falta que se pueda también ejercer la potestas e intervenir”, argumentó.Más competencias

“El sistema funciona, vivimos en un país solvente democráticamente, con garantías. Pero los ciudadanos demandan más y eso es positivo”, añadió Mikel Iturbe. En este sentido, el director de Heraldo apuntó, al igual que el resto de invitados, a la actitud de los representantes políticos cuando se revisan las cuentas de la Administración: “Cuando se ejerce este control, se critica desde la clase política y eso provoca una contradicción”, apuntó Iturbe. “No se trata de hallar culpables, sino de buscar soluciones, abundó a este respecto García Vicente.

Preguntado por la polémica en el caso del informe del Ayuntamiento de Zaragoza, Laguarta respondió que “no se han cambiado criterios, tal y como se dijo, sino que se atendió al principio de legalidad”. “Se han dado varias patadas a la espinilla a la institución y por eso defiendo el papel de la Cámara”, esgrimió. Laguarta recordó que los tres consejeros de este organismo son nombrados por las Cortes y, con ello, rechazó cualquier merma en su independencia a la hora de auditar.

Por último, las críticas al gasto que generan esta institución o el Justicia también recibieron contestación de los cuatro invitados: “Necesitamos un sistema de control preventivo, corregir los fallos 'ad initium', es la mejor inversión que podemos hacer”, afirmó José María Gimeno.