INNOVACIÓN TECNOLÓGICA

Zaragoza, la quinta provincia española en el ranquin de solicitudes de patentes

Hasta el 18 de julio había presentado 99 peticiones, por 11 de Huesca y 3 de Teruel. La Universidad es la mayor solicitante.

Aragón inventa... y patenta. O al menos lo hace Zaragoza, provincia que se mantiene desde 2006 en el quinto puesto en el ranquin de ciudades españolas en las que se solicitan más patentes. Según la estadística de la Oficina Española de Patentes y Marcas, hasta el pasado 15 de agosto se habían solicitado 99 registros en la capital aragonesa, cifra únicamente inferior a las alcanzadas en Sevilla (105), Valencia (163), Barcelona (370) y Madrid (527).

 

Por su parte, Huesca, con 11 patentes, se coloca en el puesto 20 de la lista, al mismo nivel que Badajoz o Huelva; y Teruel, con tan solo 3 solicitadas en el mismo periodo, se sitúa en el puesto número 46, superando tan solo a Ávila, Cuenca, Orense, Palencia, Ceuta y Melilla.

 

Hasta el 15 de agosto pasado se habían presentado en toda España un total de 2.329 solicitudes, lo que parece indicar que a fin de año se superará la cifra registrada en 2008 de 3.783. En cuanto a Zaragoza, con 99 peticiones, parece complicado que llegue a las 176 registradas el año pasado.

 

Una parte muy significativa de las patentes 'aragonesas' proviene de la Universidad de Zaragoza, que en 2008 cursó 20 solicitudes (73 en los últimos cinco años, periodo en el que, además, realizó 38 extensiones internacionales de sus patentes). La Universidad investiga y ello está dando sus frutos: en el último lustro ha cursado 18 patentes de explotación, que abarcan campos diversos, desde el desarrollo de nuevos medicamentos y vacunas contra enfermedades a la creación de sistemas para aumentar la seguridad del comercio en internet.

 

¿Debe entrar la Universidad en la carrera por las patentes? José Ramón Beltrán, vicerrector de Investigación, lo tiene claro: "La Universidad, como institución, está para generar conocimientos. Pero la patente es una forma más de transmitir nuestros conocimientos. Hay ámbitos científicos en los que es un valor añadido en la investigación, así que, como estrategia, favorecemos la obtención de patentes".

 

La creación de empresas 'spin of'

El problema es que la mayoría de los científicos e investigadores son ajenos al mundo empresarial y de mercado. Por eso la universidad zaragozana creó la OTRI (Oficina de Transferencia de Resultados de Investigación). Se encarga de favorecer y gestionar la interacción universidad-industria. De ahí han surgido más de veinte empresas 'spin-off' (nacidas de un proyecto anterior).

 

"Estamos intentando desarrollar una estrategia de valoración de resultados de investigación -señala Beltrán-, y la clave es contratar personal especializado que se integre en los grupos de trabajo: tiene que conocer la investigación y el mundo empresarial. Ahora, en el G-9 de Universidades queremos desarrollar un programa conjunto de gestión de innovación". Las áreas en las que la Universidad aragonesa está solicitando más patentes son la biomedicina y la ingeniería.