Zaragoza aprueba la convocatoria de ayudas para rehabilitar viviendas

Financiarán el 50% de las obras que se hagan en las Áreas de Regeneración y Renovación Urbana.

El Ayuntamiento de Zaragoza ha aprobado la convocatoria de ayudas para financiar obras de rehabilitación por valor de dos millones de euros, de los que el Consistorio aportará 211.750 euros y que posibilitarán de 50 a 75 puestos de trabajo al año.


Estas ayudas financiarán el 50 % del importe de las obras de rehabilitación que se lleven a cabo en las Áreas de Regeneración y Renovación Urbana (ARRU), informa el Ayuntamiento de Zaragoza en una nota de prensa.


Podrán beneficiarse las viviendas situadas en las denominadas zonas ARRU -que se corresponden a las anteriores Áreas de Rehabilitacion Integral (ARI): Picarral (grupo Picarral), Las Fuentes (grupos A. Casamayor y V. Escoriaza), Delicias (Grupo A. Rojas), San José (Pte. Virrey-Rosellón) y el Rabal, lo que implica 2.400 viviendas y unos 5.000 habitantes.


También se incluyen las tres Áreas de Rehabilitación Integral de Casco Historico (ARCH): San Pablo (Casta Alvarez- Zamoray y Pignatelli) y San Agustin-Alcober, en la Magdalena, que comprenden unos 14.000 habitantes y unas 7.500 viviendas.


La convocatoria, que se publicó en el Boletín Oficial Provincial el 7 de septiembre, estará abierta durante 30 días hábiles desde la fecha de publicación.


Los beneficiarios deberán ser comunidades de propietarios o propietarios únicos de los edificios, situados en dichos barrios.


El objetivo es mejorar la calidad de vida en estas poblaciones mediante la eliminación de las barreras arquitectónicas, la mejora del aislamiento y conseguir ahorros energéticos y la renovación de instalaciones, entre otras, y de manera simultánea, reactivar el sector de la construcción con la creación o el mantenimiento de empleo local y de calidad.


Las obras que se podrán acoger a estas ayudas serán las de rehabilitación de los elementos comunes de los edificios: ejecución de obras o trabajos de mantenimiento e intervención en edificios y viviendas, instalaciones fijas, equipamiento propio y elementos comunes, a fin de adecuarlos a la normativa vigente.


Los edificios deben tener un uso predominantemente residencial, pudiendo ser una o más viviendas.


Se entiende que un edificio tiene un uso predominantemente residencial cuando al menos, el 51 % de su superficie construida (excluida, en su caso, la edificada bajo rasante) tenga este destino, requisito que podrá acreditarse mediante comprobación por parte de los servicios técnicos de la Sociedad Municipal Zaragoza Vivienda o a través de información catastral o registral.

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