El Justicia critica las frecuencias del tranvía los fines de semana por las "peligrosas saturaciones"

Actúa de oficio para reclamar al Ayuntamiento un mejor servicio que evite situaciones de riesgo.

La saturación del tranvía es una de las cuestiones que hay que solventar según la Fabz
El Justicia critica las frecuencias del tranvía los fines de semana por las "peligrosas saturaciones"
O. Duch

Lo que venía siendo un clamor entre los usuarios del tranvía de Zaragoza es ahora una recomendación oficial por parte del Justicia de Aragón: hacen falta mejores frecuencias durante los fines de semana.


Así lo ha comunicado esta institución al Ayuntamiento de la ciudad tras comprobar de primera mano las aglomeraciones que sufre este transporte público. Tanto es así que no ha hecho falta la recepción de una queja ciudadana, como suele ser habitual, sino que ha sido el propio Justicia quien ha actuado de oficio.


En concreto se denuncia que el pasado 29 de marzo “se pudo constatar la saturación que sufre el tranvía al ser utilizado por un gran número de personas” y se incide en que las frecuencias son peores durante los fines de semana.


“La situación de aglomeración observada fue tal -continúa el escrito-, que puso en situación de riesgo a las personas que en aquel momento decidieron hacer uso de este medio de transporte. Los vagones iban completos y los viajeros que se encontraban en ellos de pie carecían de espacio para moverse. En cada parada la situación se complicaba en la medida en que se producía un movimiento contrario entre los usuarios que bajaban y los que deseaban acceder al tranvía, colapsándose las zonas de paso”, explica.


Además, se hace hincapié en que “esta saturación creaba una situación de riesgo físico para todos los usuarios y, en particular, para los niños, mujeres embarazadas, ancianos, personas con carritos infantiles y otras con movilidad reducida que veían fuertemente limitados sus movimientos, además de verse obligados a soportar posibles aplastamientos”.


Las frecuencias del tranvía alcanzan los cinco minutos los días laborales en sus horas punta y los 20 en los de menor afluencia. Los sábados, esos tiempos oscilan entre los 8 minutos y los 20 y los domingos entre 12 y 20.


Ante esta situación, se hicieron consultas “de manera informal” con empleados del tranvía, quienes advirtieron que “estos incidentes no eran extraños los fines de semana, llegándose a producir, en alguna ocasión, discusiones y conflictos entre los viajeros”.


Por todo ello, el Justicia de Aragón recuerda que el servicio público de tranvía “debe prestarse adecuadamente y con unos estándares mínimos de calidad, estándares que no se cumplen los fines de semana a la vista de los hechos constatados y descritos, llegando a poner en riesgo la integridad de las personas” y solicita una mejora de las frecuencias.