Zaragoza será sede permanente del centro europeo de transporte aéreo táctico desde 2019

La capital aragonesa acogerá cuatro cursos de transporte aéreo táctico europeo al año.

Zaragoza ha sido elegida como sede permanente del Centro Europeo de Entrenamiento de Transporte Aéreo Táctico, creado bajo el paraguas de la Agencia Europea de Defensa, y, si se cumplen las previsiones, terminará acogiendo hasta cuatro de estos cursos al año antes de finales de 2019.


Este nuevo centro se instalará en el edificio que tiene el Ejército del Aire en la Plaza de los Sitios de la capital aragonesa, mientras que los cursos avanzados se desarrollarán en la Base Aérea de la ciudad.

Ya en 2012 España propuso albergar el primer entrenamiento en esta base que, según ha asegurado en rueda de prensa el teniente coronel y oficial del proyecto, Carlos Marín, juega "en Champions", ya que cuenta con dos pistas de vuelo y con cuatro plataformas de las que una prácticamente no presenta problemas de espacio para el aparcamiento de las aeronaves.


Asimismo, también cuenta con las ayudas a la navegación adecuadas y la proximidad a otras zonas de entrenamiento militar, como el campo de tiro de Bardenas, las instalaciones de San Gregorio y el aeródromo de Ablitas, en Navarra, ha explicado.


De hecho, el primer entrenamiento se llevó a cabo en 2012 y supuso un "éxito rotundo", ha indicado el teniente coronel, y, tras él, se sumaron más países y se decidió que Zaragoza se convertiría en la sede permanente del Centro Europeo de Transporte Aéreo Táctico.


Este proyecto surge hace casi cuatro años y en los últimos meses la velocidad con la que se ha ido desarrollando se ha incrementado "notablemente".


Marín ha definido el transporte aéreo táctico como la capacidad de proyección para actuar en zonas de interés, por ejemplo, operando desde pistas cortas y no preparadas, con lanzamientos de paracaidistas y de cargas o vuelos a baja cota o en ambiente de amenaza aérea.


Se adhirieron al programa en un primer momento 18 naciones (Austria, Bélgica, Bulgaria, República Checa, Dinamarca, Alemania, Grecia, España, Finlandia, Francia, Lituania, Luxemburgo, Países Bajos, Portugal, Polonia, Rumanía, Eslovaquia y Suecia), a las que se unieron más recientemente Noruega y Hungría.


Los objetivos principales son mejorar las capacidades, optimizar el uso y evitar duplicidades entre distintas fuerzas armadas u otras organizaciones como la OTAN.


El referente que ha inspirado al proyecto es, según ha señalado el oficial del mismo, Estados Unidos, que lideraba un curso "muy prestigioso" al que los estados de la UE enviaban tradicionalmente a sus tripulaciones para su entrenamiento, así que decidieron crear uno similar aquí para, entre otras cosas, ahorrar horas de vuelo.


Por otro lado, el coronel jefe de la Sección de Operaciones Aéreas, Rafael Monteagudo, ha informado sobre la integración del Ejército del Aire en el Mando de Transporte Aéreo Europeo (EATC) y la consiguiente transferencia de aviones de dicho ejército a este mando, que tuvo lugar el pasado 9 de marzo.


La entrada en el EATC forma parte de una iniciativa de "Pooling & Sharing" -agruparse y compartir- encaminada a buscar sinergias entre las naciones participantes, ganar en eficiencia y, por tanto, ahorrar costes.


En virtud de ello, ahora el planeamiento, programación, control y recepción de informes para las misiones que realicen los aviones T-10 Hércules, T-21 CN-295 y T-17 Boeing 707 se realizarán desde el EATC en Eindhoven (Países Bajos).


Esta iniciativa surge hacia 1999 por impulso de Francia y Alemania y, con el paso de los años, se va desarrollando hasta que se crea definitivamente en 2010, con Bélgica, Alemania, Francia y Países Bajos, a los que se unen posteriormente Luxemburgo, España (en 2014) y, próximamente, Italia.


El lema de este proyecto es "tan eficiente como sea posible, tan eficaz como se necesite" y permite optimizar los recursos existentes, aumentar la interoperabilidad -la capacidad de los distintos estados para operar juntos- y minimizar la huella en los despliegues y, por supuesto, los gastos.


Desde el centro de Eindhoven se dan las directrices y cuenta con dos pilares: el operacional, cuya labor es el planeamiento, la programación, el control de las misiones y la realización de análisis e informes; y el funcional, que trabaja sobre las políticas comunes, la armonización o la interoperabilidad.


La flota a disposición del EATC actualmente es de 154 aviones, de los que 22 son españoles, procedentes de las bases de Zaragoza, Torrejón y Getafe.


Entre las ventajas, el coronel Monteagudo ha destacado la disminución en los últimos tres años de las misiones sin carga y, por contra, del aumento de las que transportan carga compartida.