Los Reyes Magos visitan Aragón y reparten ilusión, sonrisas y regalos

Una brillante estrella fugaz guía a los Reyes Magos por el centro de Zaragoza ante la atenta mirada de miles de niños. Melchor, Gaspar y Baltasar llegaron en globo. Visitan también Huesca y Teruel.

Los Reyes Magos aterrizaron en globo en el parque del Agua de Zaragoza
Los Reyes Magos visitan Aragón y reparten ilusión, sonrisas y regalos
Ayuntamiento de Zaragoza

Ya están aquí, tras un largo viaje desde tierras de Oriente, los Reyes Magos han llegado a Aragón cargados de regalos y tienen previsto pasar la noche repartiendo por casi todas las casas de la Comunidad. Puede que también dejen algún trozo de carbón, pero los chavales que hayan sido malos o desobedientes aún están a tiempo de tratar de convencer personalmente a Sus Majestades de Oriente de que su actitud cambiará en 2015.


Pese a la intensa niebla que cubre la capital aragonesa y guiados por una brillante estrella fugaz, como estaba previsto, la esperada cabalgata de Zaragoza ha comenzado a las 18.00, pero la primera cita con Melchor, Gaspar y Baltasar ha sido un par de horas antes en el parque del Agua. Hasta allí llegaron montados en globo y aterrizaron sin problemas a pesar de la niebla.


Después, se reunieron con sus amplias comitivas al colegio de Joaquín Costa que, como en las últimas ediciones, fue el punto de encuentro de decenas de druidas, malabaristas, saltimbanquis...


Este 2015, no obstante, hay numerosas novedades en el desfile que tratan de hacerlo aún más espectacular si cabe. Quizá la principal sea que el propio emperador Augusto, el fundador de la ciudad, se ha animado a participar con motivo del bimilenario de su muerte. Lo hace, además, de una forma grandiosa -como tenía acostumbrados a sus súbditos romanos- dado que vuelve a recorrer Cesaraugusta dos mil años después subido a una biga tirada por dos caballos. Lo acompañan los tres estandartes de las legiones romanas que habitaron la ciudad y un séquito de 40 bailarinas, que preceden a una carroza con un gran elefante, otra de las novedades de este año.


La cabalgata de hoy, en la que participan más de 500 figurantes, cambia su habitual recorrido y será -con seguridad- la más larga de los últimos años. Si hasta ahora los personajes de los cuentos de Dickens recorrían unos 1,7 kilómetros, este año tienen que caminar un poco más (aunque la mayoría va en patines) hasta alcanzar la marca de 3 kilómetros. Este ‘estirón’ del recorrido se debe a que en lugar de coger un atajo por la puerta del Carmen, Sus Majestades y compañía pasan por el paseo de la Constitución, el de la Mina, la plaza de San Miguel y el Coso Bajo antes de reengancharse con el tradicional itinerario de la calle Alfonso.


Por cierto, que este nuevo recorrido obliga a desviar hasta 17 líneas de autobús y a interrumpir el tranvía, de forma que quienes quieran acceder al centro de la ciudad entre las 17.30 y las 20.15, aproximadamente, tienen que buscar alternativas al transporte público.


También se ha aprovechado la ampliación de la cabalgata para poner en práctica una idea que no funcionó en la Ofrenda pero sí ha sido todo un éxito en la víspera de Reyes: sillas en la calle para ver el espectáculo. Hay unos 3.120 asientos en seis zonas distintas, pero todos han sido reservados ya por internet. Si, de pronto, se viera alguna silla libre en estas áreas especiales, se pueden comprar in situ al precio de un euro.


Pero de vuelta a la cabalgata, para felicidad de unos y disgusto de otros, los animales vuelven a tener un especial protagonismo. Desfilan 150 ocas, 5 caballos, 3 burros y, también, 6 perros del centro municipal de Protección Animal, que buscan un hogar de acogida. Estos van equipados con un chaleco que los identifica claramente con el lema ‘Adopta’, según informó el Ayuntamiento.


El grueso de las carrozas se consagran a los escenarios evocados por Charles Dickens en sus cuentos, si bien también las hay que se salen de este contexto. Por ejemplo, por primer año, una estrella gigante de doce metros abre el desfile, dando a entender que es la estrella de Belén y Sus Majestades tienen que seguirla. Además, también pasa por las calles (y sobre las vías del tranvía) una antigua locomotora, que recuerda a los chavales que no todo van a ser voluminosos regalos sino que algún que otro trozo de carbón traerán los Reyes también.


Lo que seguro que portan son sus ofrendas de oro, incienso y mirra, que Sus Majestades depositarán a los pies del niño Jesús del gran belén instalado en la plaza del Pilar. Como en años anteriores, en la esquina de la calle del Milagro de Calanda, los Reyes descenderán de sus carrozas, visitarán el nacimiento y, después, subirán al balcón del Ayuntamiento para saludar al gentío. Está previsto de el rey Melchor tome la palabra para recordar que esta noche toca irse pronto a dormir para que los Magos puedan hacer su trabajo.