La diputada autonómica de IU y aspirante a candidata a la Presidencia de la Comunidad de Madrid por esta formación, Tania Sánchez, ha afirmado este jueves que no comprende que se hable de ella "en la comunidad de la Gürtel y la Púnica" y ha asegurado estar "muy tranquila" con su gestión política.

Sánchez ha explicado a los medios de comunicación que los procesos de adjudicación en el Ayuntamiento de Rivas (Madrid) no dependían de cargos políticos, sino de criterios técnicos, tras la publicación de informaciones que aseguran que adjudicó un contrato a un hermano en su etapa como edil -entre 2007 y 2011-.

Ha negado también cualquier irregularidad en la venta de un piso de protección oficial y ha aclarado que se vendió conforme al precio regulado y tras pedir la autorización requerida.

"Yo estoy tranquila y deseando que alguien me explique cómo en la comunidad de la Gürtel y de la Púnica se hable de esto", ha manifestado.

En este sentido, ha calificado también de "curioso" que, unos días antes de las elecciones primarias de IU en Madrid, se publique este tipo de informaciones.

Por otro lado, respecto a la pregunta que una periodista formuló a Pablo Iglesias sobre esta información, Sánchez ha comentado que hace tiempo que lleva denunciando un tratamiento "machista" sobre el hecho de que "dos personas relevantes de organizaciones políticas distintas mantengan una relación personal".

"No se ha tratado igual a él -en relación al secretario general de Podemos, Pablo Iglesias- que a mí", ha comentado.

Sánchez ha participado, junto a la activista Ada Colau y Maru Díaz, de Podemos Zaragoza, en la mesa redonda "Cambiar la ciudad para cambiar el mundo", dentro de las "Jornadas para repensar la ciudad Imaginaz", en la capital aragonesa.

Se ha referido también al proceso de convergencia entre distintas formaciones políticas de cara a las elecciones autonómicas y municipales y ha apuntado que los ciudadanos no entenderían que organizaciones, con programas "similares", no ofrecieran una alternativa "única" y que se frustrara el cambio en el país por "problemas de identidades y cálculos electorales".