"Más del 30% de los comercios de San José han cerrado"

San José inicia una campaña de apoyo al comercio local.

Foto de familia
"Más del 30% de los comercios de San José han cerrado"

Los barrios se mueven por su comercio de proximidad. La pasada semana La Paz analizaba el impacto de Puerto Venecia sobre los establecimientos locales, este domingo el Arrabal impulsaba sus negocios en su I Feria del Stock y también, en San José, desde la asociación de vecinos se ha impulsado una campaña con diversas acciones de comunicación y sensibilización.


“Estimamos que en los últimos diez años han cerrado entre el 30% y el 40% de los comercios del barrio”, explica Juan Carlos Crespo, vocal de la asociación de vecinos. “El comercio de proximidad está sufriendo un gran bajón, y entendemos que hay que apoyarlo porque ‘hace barrio’, es más ecológico medioambientalmente, no hay que usar coche para trasladarse a grandes superficies, y da seguridad, alegría y vida”, apunta Crespo.


Ante este panorama, este domingo arrancó la campaña que se impulsa desde la asociación de vecinos con una quedada de comerciantes en la Plaza Mayor y una foto de familia.


El descalabro del pequeño comercio “se da manera generalizada en todo el barrio”, dice Crespo, quien explica que “son especialmente las pequeñas calles y las vías transversales, con menos tránsito, las que más lo están sufriendo”, y las vías con más actividad parecen aguantar más el tirón, aunque comercios de toda la vida aguantan estoicamente. “Solo estamos subsistiendo”, dice Ramón Alcaine, propietario de la papelería homónima, asentada en el barrio desde hace 60 años. “Ganamos para ir viviendo, no se puede invertir ni se puede hacer nada”, dice este comerciante de Tenor Fleta. “La juguetería daba dinero en tiempos, pero no se puede competir con las grandes superficies, y talleres y establecimientos que nos daban trabajo de copistería también fueron cerrando”, lamenta.


A la foto de familia también acudió el peluquero Roberto Vela, que desde hace 21 años se encuentra en la calle de José Pellicer. “En nuestra acera estamos prácticamente solos, hasta el zapatero hay un vacío tremendo”, dice el propietario del establecimiento, que acusa cómo se ha retrotraído el consumo: “No se han perdido clientes, pero el que venía a cortarse el pelo cada dos meses, ahora viene cada cuatro”, dice.Censo de comerciantes y originales concursos

Dentro de la campaña puesta en marcha para dinamizar las ventas de la zona se va a crear un grupo de trabajo específico en la asociación para el seguimiento de la realidad del sector y para trabajar sobre objetivos específicos de futuro, y se hará una mapeo de los establecimientos. “Queremos hacer un censo y una base actualizada de todos los comerciantes”, explican desde la asociación de vecinos.


Además de repartir carteles y folletos promocionales, de aquí a finales de año van a poner en marcha tres curiosas iniciativas. Un concurso de escaparates, cuyo ganador obtendrá un premio de 500 euros que deberá gastar en establecimientos de la zona; un concurso de fotos antiguas del barrio en torno al comercio, para rescatar estampas de la actividad de antaño y, para rebuscar aún más en la memoria, un tercer concurso de utensilios de comercio antiguo, al que se podrán presentar maniquíes, antiguas máquinas registradoras u otros artículos, que se mostrarán después en una exposición.