Un café que brinda oportunidades de negocio

El café es la clave del comercio justo. Por ello, se ha creado una nueva asociación en Zaragoza: Un café diferente. A través de ella se pretende potenciar la iniciativa privada en este mundo.

"Existe un nicho de mercado dentro de este tipo de comercio, ya que a pesar de que ha crecido durante los últimos años siempre lo ha hecho de la mano de asociaciones u ONG, en pocas ocasiones ha sido por iniciativa privada", explica José Miguel Capapé, presidente de la asociación. Por esta razón, ha creado, junto a otros 7 compañeros, esta agrupación.

Durante dos años, José Miguel trabajó como voluntario en la región de Rondonia de Brasil. "Lo que más me marcó fue estar en contacto con pequeñas cooperativas de agricultores que trabajan el café de comercio justo", puntualiza. Para él es asombroso comprobar cómo el esfuerzo del día a día en aquel país no se valora España, donde se consumen los productos sin ningún interés adicional. Sorprendentemente, después de dos años en Brasil no ha conocido nada más que la región en la que residió. "Viví como uno más, y como tal, no salí de los pueblos en los que nos encontrábamos", asevera.

Más tarde, comenzó a colaborar en Intermón Oxfam, trabajo que dejó hace poco más de un año para comenzar esta nueva andadura."Queremos promover el emprendimiento en el comercio justo privado", subraya Capapé, quien empezó a fraguar la idea hace un año y la pasada semana presentó su proyecto a todos los aragoneses. Sin embargo, no será hasta septiembre cuando pongan en marcha su primera campaña para vender café justo.

Esta primera acción se basa en una campaña informativa, sin embargo, la intención es poder ser el nexo de unión entre emprendedores y empresas. "Cuando cualquier persona venga a contarnos su idea dentro del comercio justo, nuestro plan es poder ayudarle, facilitarle información, explicarle con qué tipo de productos lo puede hacer, ponerle en contacto con empresas, etc", sostiene Capapé.

"Tenemos claro que lo más importante es que la gente sepa qué es para poder reconocer el valor añadido que tiene", señala Capapé. Para él, lo fundamental es adaptar la explicación a cada grupo de personas. "Por ejemplo, a los empresarios hay que hablarles de la responsabilidad social corporativa, que hará que todos sus clientes vean que apoyan propuestas para mejorar el mundo".

En el caso de que se quiera persuadir a una madre, Capapé destaca que se le debería explica que con un desayuno basado en el comercio justo (café, cacao, azúcar...) están consiguiendo que otra madre pueda llevar a sus hijos a la escuela en los países del sur.

Consiguiendo que la gente comprenda el valor añadido del café, tendrán más fácil su nuevo proyecto. Con él, pretenden que las personas comprometidas con este estilo de asociaciones puedan trabajar de ello y no tener que aceptar un trabajo que no les motive. "Da mucha rabia que no puedan desarrollar las capacidades que tienen, por eso esperamos que esta iniciativa ayude a muchos a emprender", puntualiza.Café de comercio justo para las empresas de 'vending'

El primer proyecto de esta asociación se va a centrar en las empresas que tienen máquinas de café para sus trabajadores. "Ya hay varias compañías de 'vending' que cuentan con comercio justo, sin embargo, no saben diferenciarlo del resto, mostrar su valor, tanto social como de calidad", asegura Capapé.

Por eso, la primera fase del proyecto, que se espera que esté preparada para septiembre, se basa en una campaña de comunicación. "Hay que transmitir de buena manera lo que se está haciendo con estos productos del sur", asevera. Generalmente, el café viene de países de Centroamérica como Brasil, de África central como Angola o El Congo y también de la India.Una tendencia al alza

Desde que hace 24 años abriera la primera tienda de Zaragoza dedicada al comercio justo se ha producido un gran aumento de este tipo de establecimientos. Actualmente, en Aragón cuenta con una treintena, entre ONGs y pequeños comercios, hasta las grandes superficies como Alcampo o Eroski.

Este aumento ha sido provocado por el incremento de las ventas de este tipo de comercio. En una década se ha pasado de gastar 8 millones de euros en 2002 a más de 28 en 2012. Además, el consumo de azúcar, cacao y café supone el 88% de las ventas, según la Coordinadora Estatal de Comercio Justo.