Calurosa bienvenida

El edificio abrió sus puertas con dos exposiciones de arte contemporáneo.

La exposición 'Planos sensibles', en el primer piso
Miles de zaragozanos dan una calurosa bienvenida al Caixaforum

Curiosidad, sorpresa, admiración... cada uno de los miles de zaragozanos que visitaron el flamante Caixaforum en su primer día de funcionamiento presentó una emoción diferente ante el nuevo y singular edificio. "¡Qué majo ha quedado!", exclamaba una señora nada más atravesar las puertas giratorias que dan acceso al vestíbulo. "¿Todas esas escaleras vamos a tener que subir?", se preguntaba una compañera a su lado segundos antes de percatarse de la presencia de una hilera de ascensores que conducen directamente a la primera altura.


Ahí, en la sala inmediatamente superior, los visitantes pudieron disfrutar de 'Planos sensibles', una exposición marcada por lo abstracto y nutrida de cuadros y esculturas de Miquel Barceló, Eduardo Chillida, Joan Miró, Antonio Saura, Antoni Tàpies, Jorge Oteiza o José María Sicilia, entre otros (en total, la muestra lleva el sello de 21 artistas contemporáneos).


Por la estancia pasaron, en su primer día de vida, personas de todas las edades y entre la que destacaba la gente joven, como Andrés y Pilar, dos estudiantes de 23 y 22 años que veían "muy importante" la llegada de la Fundación la Caixa a la capital aragonesa: "Hemos estado en el Caixaforum de Madrid un par de veces y las dos nos ha gustado. La última vez, hace un par de meses, pudimos ver la exposición de Pixar, que merece mucho la pena".


Hasta las inmediaciones de El Portillo se acercaron también muchos zaragozanos de avanzada edad. "Todo lo que sea traer cultura es siempre bueno", señalaba María Dolores, de 72 años, quien además lanzaba un aviso: "No consiste sólo en construir museos, sino también en hacerlos atractivos y conseguir que la gente venga".


Un piso por encima, en la segunda altura, se encuentra 'Narrativas en la imagen', una propuesta más atrevida y que tiene en los audiovisuales su idea central. Las obras, creadas por dieciseis artistas distintos, presentan diferentes narrativas visuales y giran entre lo literario, lo teatral y lo cinematográfico. Una sala que, de inicio, no dejó indiferente a nadie. "No soy mucho de arte moderno, pero me ha parecido interesante. Espero venir a menudo", apuntaba Jesús, un zaragozano de 37 años.


Tampoco pasaron desapercibidas las terrazas. Una en la primera altura ofrece una vista poco habitual de la calle de Anselmo Clavé. La otra, en la azotea, conviviendo con la cafetería y salpicada por varios olivos, abre una amplia panorámica del entorno. El edificio se completa con una sala infantil, dos aulas pensadas para la formación y un auditorio en el primer sótano.


Entrada libre hasta el 6 de julio


Todos los zaragozanos están invitados a conocer el nuevo espacio cultural de la capital aragonesa desde este sábado, día en que acoge varias actividades de la Noche en Blanco. El acceso será gratuito desde la apertura hasta el próximo domingo 6 de julio.


Tras esas jornadas de puertas abiertas, la gratuidad se mantendrá para todos los clientes de La Caixa y para los menores de 16 años. El resto de visitantes deberá abonar cuatro euros para ver las exposiciones, porque tanto el acceso al vestíbulo como a la cafetería (situada en la última planta) será siempre gratuito. Abrirá de lunes a domingo y festivos de 10.00 a 20.00. Solo cerrará sus puertas los días 25 de diciembre y 1 y 6 de enero.