Los vecinos de Montañana piden cambios en la línea 28

En una petición que enviada al Ayuntamiento aseguran que se sentirían más integrados en la ciudad si el autobús llegase hasta el Coso por Don Jaime.

Paradas de la línea 28
Los vecinos de Montañana piden cambios en la línea 28

Los vecinos del barrio de Montañana han reunido más de mil firmas para pedir al Ayuntamiento de Zaragoza cambios en la línea 28 del autobús. Sienten que salieron perjudicados en la última modificación de los autobuses y ahora esperan que el Consistorio atienda sus reclamaciones.


Según explica María Ángeles Lasierra, presidenta de la asociación de vecinos Montanus, “basta con unas pequeñas modificaciones para que los habitantes de Montañana se sientan más integrados en Zaragoza”, ya que este autobús es su forma más directa de llegar a la ciudad.


Desde la modificación, el 28 llega al centro desde la avenida de Cataluña por el puente de Piedra y a continuación sube por San Vicente de Paúl, donde finaliza su recorrido. Los vecinos que han apoyado la reivindicación con su firma piden que el autobús suba hasta el Coso por la calle de Don Jaime I, para terminar así más cerca del tranvía. Además, también quieren que en vez de volver hacia Montañana por el puente de Hierro, el autobús salga de Zaragoza pasando por el paseo de Echegaray y Caballero y el puente de Santiago. “Eso nos daría la opción de poder comprar en el Mercado Central, por ejemplo, porque ahora no podemos ir hasta el puente de Hierro con toda la carga”, explica María Ángeles en representación de sus vecinos.


La presidenta de la entidad vecinal expone que si no hay un recorrido que satisfaga al barrio habrá cada vez más personas que cojan el coche para llegar hasta Zaragoza. “Por tanto, cambiar el recorrido es lo mejor para todos. Para el barrio y para Zaragoza”.


Además, Montañana ha pedido al Ayuntamiento que se rebajen las frecuencias de los autobuses a quince minutos, ya que actualmente el 28 pasa, según denuncian, cada media hora. “Es de locos que para volver del Mercadona, que está a unos dos kilómetros de distancia, haya que esperar 30 minutos al autobús”.


No solo las frecuencias indignan a los vecinos. El malestar radica también, según denuncian, en la fatal de marquesinas en gran parte de las paradas. “Son tiempos de espera muy largos y no nos podemos refugiar en ningún sitio ni del viento, ni de la lluvia ni del frío”. Entre las ocho paradas señaladas, la asociación Montanus recalca la urgencia de instalar marquesinas en cuatro, donde cogen el autobús más personas mayores. “Hay en otros puntos donde hay supermercados cerca y nos podemos resguardar pero la gente mayor necesita sentarse. No puede esperar tanto tiempo de pie y menos aún si vuelven cargados desde Zaragoza”.


Los vecinos entregaron las firmas al Ayuntamiento hace ya una semana y ahora se mantienen a la espera de una respuesta municipal.