La familia del joven brasileño, Víctor da Silva, desaparecido en la mañana de Año Nuevo cuando volvía de un cotillón celebrado en el Parque del Agua de Zaragoza, ha reclamado que no se paralice su búsqueda.

Así lo ha indicado el abogado y representante de la familia, Carlos Vela, después de una concentración convocada este sábado en la plaza de España de la capital aragonesa, bajo el lema 'Todos somos Víctor'.

Carlos Vela ha recalcado que esta concentración, a la que han acudido familiares y amigos del joven, se ha realizado con el objetivo de pedir "que no se paralice la búsqueda" y que "se retomen todas las hipótesis posibles" sobre la desaparición.

En este contexto, ha explicado que la familia descarta que el Víctor da Silva se cayese al río aquella mañana, ya que "posiblemente habría sido visto".

Al parecer, el joven dejó el cotillón de Año Nuevo hacia las 7.30 horas y fue visto por última vez a las 8.00 horas junto a GranCasa, en el distrito del Actur, donde la Policía Local le identificó.

Entre las 10.05 y las 10.10 horas, en el Polígono Cogullada, se realizaron cuatro llamadas desde su teléfono móvil a la empresa de autobuses Alosa, que presta servicio entre Zaragoza y Huesca.

En principio, Da Silva no tiene relación alguna con la capital altoaragonesa, además, en la llamada saltó el contestador automático de Alosa. Por otra parte, la Policía Nacional preguntó a todos los conductores de la compañía, que lo reconocieron.

Posteriormente, Víctor da Silva se habría dirigido a su casa. El repetidor de la calle Felisa Galé, en el barrio de La Jota, cerca ya de su vivienda de Vadorrey, ha situado allí su móvil desde las 11.30 horas hasta las 12.35. 

"Nunca se interrumpe"

Por su parte, fuentes de la Policía Nacional han subrayado, que la búsqueda del joven brasileño sigue en marcha, dado que el dispositivo para encontrar a una persona desaparecida "nunca se interrumpe".