Zaragoza propone homenajear al ex Capellán de Torrero

Gurmesindo de Estella sería homenajeado con motivo del 75 aniversario del fin de la Guerra Civil.

El Ayuntamiento de Zaragoza ha propuesto al Gobierno de Aragón un homenaje al ex Capellán de Torrero Gurmesindo de Estella el próximo 1 de abril con motivo del 75 aniversario del fin de la guerra civil, según ha dicho el alcalde de la ciudad, Juan Alberto Belloch.


El regidor, que ha comparecido este viernes en rueda de presa, ha manifestado que homenajear a este capuchino, que dedicó 3 años de asistencias a personas que iban a ser fusiladas en la cárcel de Torrero, es una forma de reconocer la historia "desde el espíritu de la comprensión y de la unidad".


Ha añadido que este reconocimiento sería un "consuelo real" para los familiares de las personas que perdieron la vida durante la Guerra Civil.

El capellán


Gurmesindo de Estella, que en realidad se llamaba Martín Zubeldía, fue capellán de la cárcel de Torrero de 1936 a 1942, unos años en los que el capuchino atendió espiritualmente y ofició la extremaunción a los reos que fueron fusilados en las tapias traseras del cementerio.


El historiador Julián Casanova, que ha sido uno de los partícipes en documentar la historia del capellán en el libro "Fusilados en Zaragoza. 1936-39.Tres años de asistencia espiritual a los reos", ha dicho que Gurmesindo de Estella fue un hombre con un "carácter extraordinario" que fue muy "crítico" con la Iglesia por los lazos de complicidad de la institución católica con el régimen de Franco.


Durante los años que ejerció de capellán en Torrero, Gurmesindo elaboró un diario en el que recogió los testimonios de los detenidos y sus experiencias personales en los que se ponen de manifiesto su "afán por absolver", ha indicado el historiador.


Casanova ha apuntado además que este reconocimiento es una buena forma de explicarle a las nuevas generaciones los "pasados traumáticos" de la historia de España.


Asimismo, Belloch ha informado de que se va poner el nombre de Gurmesindo de Estella a una plaza del cementerio de Torrero