El Pleno del Ayuntamiento de Zaragoza ha aprobado, con el único voto en contra del PP, los presupuestos municipales de 2013, que ascienden a 695 millones de euros incluido el gasto de las sociedades y organismos municipales y que registran un incremento del 14 por ciento en políticas de acción social.

Se da así finalmente el visto bueno a unas cifras que fueron aprobadas inicialmente el pasado 22 de marzo, día tras el que se abrió un periodo de alegaciones que culmina en la aprobación en la sesión plenaria, cuando ya han pasado casi cinco meses del ejercicio presupuestario al que se refieren, lo que ha provocado las críticas del portavoz del PP, Jorge Azcón.

El vicealcalde y consejero de Economía y Hacienda, Fernando Gimeno, ha explicado que los presupuestos aprobados en Zaragoza son "prácticamente los mismos" que se sometieron a votación en marzo, con una única modificación de 1,5 millones de euros de pago de intereses que cambian del capítulo 6 al 3.

Azcón ha dicho, por su parte, que el retraso en la aprobación es "un indicador de cómo funciona el tripartito municipal: tarde y mal", a lo que Gimeno ha replicado que esta tardanza "en ningún caso" paraliza la vida municipal, puesto que a 30 de abril ya se han ejecutado 234 millones de euros. 

"Estamos gestionando a toda velocidad y hay margen más que suficiente para gastar al ritmo de las necesidades sociales", ha agregado.

El presupuesto consolidado asciende a 695 millones de euros, un 2,6 por ciento más que el de 2012, y al margen de organismos y sociedades, las cuentas del ayuntamiento suponen 652 millones, un 1,3 por ciento más.

Destacan los 121 millones para fines sociales, con un incremento neto de los programas de intervención social de 11 millones.

Gimeno ha insistido en que estos presupuestos son "expansivos" y marcan las prioridades que son "adecuadas" a la situación de crisis, dando prioridad al gasto social como "instrumento que iguala a los vecinos de Zaragoza", además de que se ha apostado por el mantenimiento del empleo público municipal, todo ello cumpliendo el objetivo de mantener la estabilidad presupuestaria.

Pago de intereses

No obstante, el portavoz popular ha enfatizado que la partida que más se incrementa es la destinada al pago de los intereses de una deuda generada "por la ineptitud en la gestión" del equipo de gobierno.

Por su parte, el portavoz de CHA, Juan Martín, ha destacado que el presupuesto en acción social supone el 18 % del total de las cifras, lo que es una "reorientación política" del consistorio de Zaragoza, que debe asumir competencias "absolutamente impropias" de un ayuntamiento y que debería ejercer el Gobierno de Aragón.

Estos presupuestos demuestran, ha agregado, que "se puede hacer otro tipo de política" y "generar esperanza" en los ciudadanos.

Por IU, José Manuel Alonso ha reconocido que los presupuestos son "insuficientes" y que Zaragoza "necesitaría muchos más recursos para hacer frente a una crisis cuyas consecuencias son muy graves para mucha gente".

Pero se ha mostrado complacido por poder participar de un presupuesto que respeta los derechos de los ciudadanos, apoya a la escuela pública, lucha contra los desahucios, fomenta la rehabilitación de vivienda e intenta mantener el empleo.

Ha asegurado también que IU está "empecinado" en mantener el gasto social por encima de "grandes proyectos que a algunos parecen gustarles tanto", y ha dicho que su grupo será "absolutamente leal" con lo acordado, pero que exigirá al equipo de gobierno "la misma lealtad" en el cumplimiento de los plazos para que los presupuestos sean ejecutados.

Alonso y Martín han coincidido, además, en criticar al PP por intentar favorecer los intereses de las grandes contratas, entre ellas FCC, y preferir pagar los intereses de las deudas que se mantienen con ellas antes que atender las demandas sociales.

"A ustedes les preocupa un carajo la acción social, lo que les preocupa es que FCC cobre no sé cuántos millones de intereses", ha afeado Martín al PP.

Azcón ha replicado que en el estado de derecho, un juez ha decretado que hay que pagar la deuda, porque en caso contrario podrán derivarse responsabilidades penales.