Más de 350.000 propietarios de vehículos están llamados desde el pasado lunes, y hasta el 15 de junio, a abonar el impuesto de circulación en Zaragoza. Esta tasa municipal, que en algunos casos ha experimentado una subida del 2,7% con respecto al año 2012, varía en función de la potencia del vehículo. Va desde los 8,80 euros que deben abonar los ciclomotores hasta los 296,60 que están obligados a pagar los dueños de autobuses de más de 50 plazas y de camiones de más de 9.999 kilogramos de carga útil.

Con un porcentaje que roza el 75% del total del padrón, los turismos son los vehículos inscritos más numerosos. El registro incluye, además de turismos, motocicletas, autobuses, camiones, tractores, remolques y semirremolques.

El impuesto que deben abonar va desde los 22,60 hasta los 224 euros, dependiendo de los caballos fiscales que tenga el vehículo. La cuantía del impuesto que deben afrontar los propietarios de motocicletas va desde los 8,80 euros de los ciclomotores hasta los 121,16 euros de las motocicletas de más de 1.000 cc.

Estas tasas son muy similares a las de otras capitales de provincia españolas de similar población a Zaragoza, como Valencia, Sevilla o Málaga, según la asociación Automovilistas Europeos Asociados (AEA). Los precios de la capital aragonesa también son muy similares a los de Huesca y Teruel. 

Según los datos que aparecen en el presupuesto de Zaragoza del año 2012, el Ayuntamiento ingresa en torno a los 30 millones de euros por este impuesto. 

Más de 350.000 vehículos en Zaragoza

Según los datos estadísticos recogidos por el Ayuntamiento de Zaragoza, 2012 finalizó con 350.352 vehículos inscritos. Desde 2003, cuando el Ayuntamiento registró 296.194 vehículos, el padrón de vehículos de Zaragoza ha crecido en 50.000 unidades.

Todos estos son solo una parte de todos los que circulan por la capital aragonesa. Conocer el número real de vehículos que circulan por Zaragoza está, según explican desde el Ayuntamiento, lejos de su alcance.

Se necesitaría cruzar estos datos con, entre otras, estadísticas elaboradas por la Dirección General de Tráfico (DGT). Algo que no se ha conseguido de momento pero que al Consistorio le gustaría que se hiciera algún día.

En el pueblo, más barato

El Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica (IVTM) se creó en España hace aproximadamente dos décadas y genera unas ganancias en las administraciones locales que superan los 2.000 millones de euros anuales, según los datos que maneja la asociación Automovilistas Europeos. Los ayuntamientos aragoneses, según los datos del Ministerio de Hacienda y Administración Públicas, ingresaron el año pasado más de 70 millones de euros por este impuesto.

Según señala AEA, la ley permite a cada ayuntamiento fijar libremente su tarifa dentro de unos márgenes y es esta facultad discrecional lo que ha dado lugar a que se creen en España verdaderos “paraísos fiscales” en relación con el pago de este impuesto municipal.

Esta asociación de automovilistas elabora cada año un ranquin con los ayuntamientos que más coches tienen registrados por habitante. El primer ayuntamiento aragonés en aparecer es el de Retascón, en Zaragoza. Según AEA, este pueblo zaragozano de 70 habitantes tiene 'empadronados' 476 vehículos, por lo que cada habitante de esta localidad de la comarca del Campo de Daroca sale a 6,80 coches. 

La Cerollera, en Teruel, fue uno de los mayores paraísos fiscales de vehículos de España. En 2008 llegó a tener, con solo 24 habitantes, un parque móvil cercano a los 26.000 vehículos. No es que sus habitantes tuvieran más de 1.000 vehículos por cabeza, sino que una empresa de alquiler de coches se estableció en el pueblo y censó en él todos sus vehículos. Porque lo de ahorrarse unos euros en el 'número' del coche (como se llamó hace años a este impuesto) no es solo cosa de particulares.