Zaragoza

Vadorrey pide marquesinas de bus en Marqués de la Cadena

Mientras desde la Asociación Ribera del Ebro aseguran haberlas solicitado "hace meses", desde el Ayuntamiento de Zaragoza argumentan que "se instalarán cuando sea posible".

Parada de autobús en la calle de Marqués de la Cadena
Parada de autobús en la calle de Marqués de la Cadena
T. M.

Viento, lluvia, frío durante el invierno y “mucho calor” cuando pega el sol es lo que los usuarios de las líneas 41, 45 y Ci1, que residen en el entorno de Marqués de la Cadena, en Vadorrey, están habituados a soportar. Y es que, a pesar de estar considerada como una “petición histórica” para muchos, la solicitud de marquesinas de autobús en un tramo de la calle, “justo las que está al principio y al final del puente de La Unión”, apuntan desde la Asociación de Vecinos Ribera del Ebro, continúa estando en el aire.


“No es lógico que, a estas alturas y con el paso de varias líneas de bus ya consolidadas, quienes tengan que acercarse hasta la parada tengan que esperar a la intemperie, literalmente, porque ni siquiera hay ningún portal o garaje donde resguardarse”, comenta Adrián Lafuente, presidente del colectivo vecinal.


“Hemos pedido este tipo de mobiliario público por activa y por pasiva ante la junta de distrito en numerosas ocasiones, porque, a nuestro parecer, es algo que afecta muy directamente a los vecinos, pero las soluciones nunca llegan”, dice Lafuente. Una solicitud que, según argumentan fuentes municipales, “se llevará a cabo en cuanto sea posible”.

Quejas de los vecinos

Respuesta que no convence, “en absoluto”, a los afectados. “Siempre pagamos justos por pecadores. El billete del bus lo abonamos igual que el resto, pero las condiciones en las que tenemos que esperar a que llegue el transporte no son las mismas. No es justo, y menos ahora, que seguro que marquesinas habrá de sobra con el recorte que han hecho en casi todas las líneas”, apunta Rebeca Gómez, que reside en el barrio.


“Imagino que no es el único punto de la ciudad en el que estas cubiertas son necesarias y cada uno se quejará de la carencia de las mismas en sus barrios, pero es que, en este punto en concreto, justo en el comienzo del puente, dirección hacia Las Fuentes, hay espacio más que suficiente para instalarlas y no es una sino tres las líneas que tienen parada aquí”, comenta Alberto Lorenzo, vecino de Vadorrey. “Pasa lo mismo justo enfrente. Casi es mejor bajar un tramo andando para coger el bus en la parada anterior”, dice Lorenzo.


“Si al menos pusieran postes con temporizadores para saber cuántos minutos has de estar pasando frío o mojándote, la espera se haría menos cuesta arriba”, apunta Beatriz Polo, también vecina de Vadorrey y usuaria “puntual” del 45. “Parece una tontería, pero bajarme o coger el bus en las siguientes o anteriores paradas a mí me supone unos diez minutos más andando que, si vas con la hora justa, hacen que siempre llegues tarde a tu destino. Por eso evito ir en bus y, si no llueve, cruzo el puente andando. Total, frío o calor voy a pasar igual esperando a que llegue el 45…”, asume la joven.


Una situación que desde la Asociación Ribera del Ebro confían que se solucione “cuanto antes, por el bienestar de los vecinos”.