La Policía requisó cortadoras de carne de casa del detenido por descuartizar a su mujer

Antonio Losilla Longares, de 54 años, pasó este miércoles su primer día en la prisión de Zuera, donde el juez lo envió de forma provisional como presunto autor del asesinato de su mujer, Pilar Manuela Cebrián Embid, de 51, que desapareció el pasado abril y cuyos restos, a falta de confirmar por la prueba de ADN, son los que se hallaron descuartizados en un paraje de Cadrete el 22 de octubre. Además de por la muerte de su esposa, el sospechoso está imputado por violencia de género, denuncia falsa, falsificación documental, detención ilegal, revelación de secretos, amenazas y coacciones.

A pesar de que ante el magistrado que le tomó declaración, asistido por su letrado, Javier Notivoli, se declaró inocente, la Policía tiene el firme convencimiento de que es el presunto autor del crimen y que con toda probabilidad lo llevó a cabo en la casa familiar que el matrimonio tenía en Ricla, de donde era natural Pilar Cebrián, ya que él es de Alfamén. Por eso, el pasado lunes agentes de Homicidios, Policía Científica y del GOIT (Grupo Operativo de Intervenciones Técnicas), acompañados de médicos forenses, inspeccionaron durante horas la vivienda y recogieron muestras de restos biológicos, así como cuchillos, cortadoras y máquinas para el despiece de carne. No hay que olvidar que los suegros de Losilla eran carniceros, profesión que él llegó a desempeñar junto a su esposa durante un tiempo.

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