"Ha sido inevitable el desenlace"

El delegado de Gobierno en Aragón aseguró que el atrincherado no contestó en ninguna ocasión "a los requerimientos de la Guardia Civil".

El delegado del Gobierno en Aragón, Gustavo Alcalde, ha lamentado la muerte del hombre que ha estado atrincherado más de doce horas en su casa, después de disparar con un arma a la pareja de su hija y a un agente de la Guardia Civil, pero ha asegurado que este desenlace "ha sido inevitable".


Se ha hecho "todo lo humano y posible por que hubiera un desenlace normal, ya no digo feliz", porque el asunto venía antecedido por lo ocurrido ayer, ha afirmado hoy el delegado del Gobierno en Aragón, quien se ha desplazado a Ejea de los Caballeros, localizad zaragozana donde se ha producido el suceso.

El delegado ha insistido en que se ha estado "trabajando toda la noche intensamente, con ayuda de varios mediadores y con la colaboración de la familia y amigos, pero ha sido imposible".


El hombre "ha hecho caso omiso y no ha contestado ni una sola vez a los requerimientos de la Guardia Civil para que saliera", ha afirmado.

Alcalde ha explicado que, cuando ha entrado el equipo de intervención de la Guardia Civil a la casa, "han sido recibidos a disparos, y no ha quedado más remedio que contestar en defensa propia".


No obstante, el delegado del Gobierno ha dicho que no puede dar más información sobre el caso porque está bajo secreto de sumario.


La investigación en el entorno del fallecido determinará qué pudo impulsar a este hombre "a tener este comportamiento".


El delegado ha dicho que no le consta que haya habido denuncias previas entre el agresor y la víctima "de ningún tipo".


En cuanto al estado de los heridos, el delegado ha explicado que el novio de la hija del fallecido, que fue trasladado al hospital Clínico de Zaragoza, "está fuera de peligro".


Mientras, el agente de la Guardia Civil que ha resultado herido al entrar en la vivienda ha recibido un disparo en la mano derecha, en la que ha sufrido "heridas importantes", y está siendo intervenido en el hospital Miguel Servet de Zaragoza, adonde ha sido trasladado.


En cuanto al agente que resultó herido, poco después de la pareja de la hija y que llevaba puesto el chaleco antibalas, "está bien", aunque fue trasladado al hospital porque tenía una hemorragia en el oído.


El cadáver del fallecido ha sido levantado hacia las once de la mañana y hasta las inmediaciones de la vivienda se han trasladado multitud de curiosos, además de familiares y amigos del fallecido.