El Gobierno de Aragón comprará por 11.588.281 euros el 21,32% de la participación que en la propiedad de la Feria tiene la Cámara de Comercio de Zaragoza, con lo que la comunidad se convierte en el accionista de referencia de la institución ferial, con más del 60%.

La compra se hará en cuatro anualidades entre 2015 y 2018, según se ha acordado en la reunión de la Junta de Partícipes de la Feria que se ha celebrado con la asistencia de los consejeros de Hacienda y Administración Pública, Javier Campoy, e Industria e Innovación, Arturo Aliaga.

La Comunidad Autónoma ya tenía en su poder el 38,155% de la propiedad de la Feria y con este acuerdo la ampliará hasta el 63%, ya que, además, suma la parte proporcional que cada copartícipe recibirá del 9% que la institución ferial mantenía en concepto de autocartera, ha informado el Ejecutivo regional.

Además del gobierno aragonés, la propiedad de la Feria se la reparten el Ayuntamiento de Zaragoza, con un 12,18%, la Cámara de Comercio e Industria de Zaragoza, que se queda con el 11,05 % del 33 que tenía, la Diputación Provincial, con un 10,49%, e Ibercaja, con un 3,28%.

Los términos económicos de la operación se han determinado de acuerdo a un informe de tasación que ha valorado en 54.353.127 euros el patrimonio total de los terrenos, construcciones, instalaciones y activos de todo tipo de la Feria de Zaragoza.

La finca urbana en la que se ubica la Feria está en el barrio rural de Miralbueno, junto a la carretera N-II (Madrid-Zaragoza-Barcelona), y tiene 360.000 metros cuadrados.

Cuenta con diferentes instalaciones que incluyen once pabellones, un Palacio de Congresos, calle comercial con locales y oficinas, galería de servicios, área de exposición descubierta y aparcamiento pavimentado, entre otras dependencias.

Con la compra, según ha señalado en una nota el Ejecutivo aragonés, se garantiza "la viabilidad de la institución ferial y de la Cámara de Comercio de Zaragoza" en un contexto de "complejidad financiera", que le lleva a prescindir de parte de su patrimonio.

"El Gobierno de Aragón ha decidido dar este paso para garantizar la viabilidad de dos entidades tan valiosas para la economía aragonesa como son la Feria de Zaragoza y la Cámara de Comercio, que en estos momentos atraviesa un momento complicado", ha dicho Campoy, según se destaca en un comunicado de su departamento.

"Estamos convencidos -ha añadido- de que este paso es bueno para Aragón y para los aragoneses, porque la Cámara y la Feria son dos entidades que en sus diferentes ámbitos actúan como un auténtico motor de desarrollo económico y de creación de empleo para Aragón".

Aliaga ha afirmado, por su parte, que con la nueva normativa autonómica "las cámaras deben adecuar sus presupuestos a nuevas fórmulas de gestión más transparentes y privadas y con cuotas voluntarias", por lo que "se producía una situación compleja" en la Cámara de Zaragoza.

"Dado que la Feria de Zaragoza es un motor económico y entendemos que cumple una función de interés público -ha resaltado-, creemos que hay que dar ese impulso para dejar la situación económico- financiera en vías de equilibrio, para que sigan cumpliendo cada una de las instituciones con sus funciones de interés general".